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Reciben por primera vez el Cuerpo y la Sangre de Cristo en sus vidas

Reciben por primera vez el Cuerpo y la Sangre de Cristo en sus vidas

La Prelatura de Bocas del Toro celebró con mucha alegría y en diversas comunidades parroquiales la finalización del curso preparativo para recibir la Primera Comunión, ceremonia que realizaron en días pasados,  en compañía de sus sacerdotes quienes otorgaron por primera vez el Cuerpo y la Sangre de Cristo a decenas de niños.

En la Parroquia San José de Chiriquí Grande, la celebración fue muy emotiva. El Padre José March habló en su homilía sobre la iniciación de la vida cristiana como un encuentro personal con Dios, que empieza con la iniciativa absoluta de Dios de darnos la existencia de manera gratuita, esperando que se le reconozca como procedencia.

Las catequistas María Luisa Quintero y Lilia González, después de la comida, exhortaron a los padres y a los niños a no dejar la colaboración en la comunidad eclesial, y tampoco la educación en la fe.

“En esta edad difícil es necesaria la ayuda de la parroquia para que el niño siga alimentándose en la Eucaristía de todos los domingos y, continuar la formación en la Infancia y Adolescencia Misionera presentes en nuestra parroquia”, señalaron las animadoras.

También en la Parroquia Nuestra Señora del Carmen de Isla Colón hubo Primeras Comuniones, en el marco de la fiesta de la Inmaculada Concepción. Un total de 22 niños, luego del tiempo de preparación recibieron a Cristo en su vida a través del Cuerpo y Sangre.

La misa  fue dirigida por el Padre Alberto Kobha Karo, SVD y fue una celebración viva y llena de solemnidad, apoyada por el coro parroquial que cantó muy lindo.  Asistieron a la misa los familiares de los niños que recibieron la primera comunión, y los feligreses que agradecieron a Dios por la existencia de las madres en la vida.

Como dice la palabra en el Evangelio, los feligreses presentes se llenaron de gracia y alegría, porque el Señor siempre está en su vida, en la comunidad y en su familia. Por eso después de la misa, se realizó una procesión en las calles de nuestra comunidad, y finalizada la procesión se celebró un brindis en el salón parroquial de la iglesia.

Gracias a Dios por darnos a Santa María, la Madre de la Iglesia, gracias por todas las madres en este mundo y la oportunidad de celebrar la misa de la primera comunión para tantos niños de la prelatura.