Billings Panamá impulsa la enseñanza del auténtico método de la ovulación, con base científica y espiritual.
Por Marianne Colmenárez
“El cuerpo tiene un lenguaje que nos habla, solo hay que aprender a escucharlo”; de esta manera Catalina Benalcázar resume la esencia del Método de la Ovulación Billings (MOB), una propuesta que enseña a reconocer los signos naturales de la fertilidad para vivir la sexualidad con libertad y responsabilidad.
Desde su labor como instructora y directora de Billings Panamá, impulsa la formación de matrimonios que buscan armonizar la ciencia con la fe en su vida familiar.
Billings Panamá es la organización acreditada para la promoción y enseñanza del Método de la Ovulación Billings en el país. Está afiliada a Woomb Latinoamérica y Woomb International, redes de naciones dedicadas a la formación y acompañamiento en la enseñanza del auténtico método.
Los guías tienen el deseo de que cada persona pueda vivir su fertilidad con conciencia, libertad y responsabilidad, reconociendo que esta no es solo un asunto femenino, sino una realidad compartida entre el hombre y la mujer.
Catalina conoció el método mientras participaba en su grupo juvenil. “Como estudiante de enfermería, lo vi como una respuesta para vivir la sexualidad según las enseñanzas de la Iglesia”, destacó.
Actualmente existen instructores en la Arquidiócesis de Panamá y en las diócesis de Chitré, Colón y Santiago, motivados por el deseo de que cada persona viva su fertilidad con conciencia, libertad y responsabilidad, objetivos del método.
Un método natural y científico
A quienes consideran que los métodos naturales son antiguos o poco eficaces, Benalcázar responde que esa percepción surge del total desconocimiento.
“El Método de la Ovulación Billings es un camino natural de reconocimiento de la fertilidad, sencillo y científicamente comprobado. No se trata de un método anticonceptivo, sino de una forma de conocer el cuerpo y respetar su lenguaje natural”, señaló.
Su clave está en el moco cervical, un indicador confiable de fertilidad, y su efectividad alcanza el 99.7%.
“Las observaciones se realizan con la misma naturalidad con que la mujer presta atención a su menstruación. Solo necesita notar cómo siente su vulva a lo largo del día y anota al final de la jornada la señal más fértil que haya percibido”, detalló Catalina.
Transformaciones en la vida de pareja
El método genera cambios profundos en quienes lo practican. Según Dayana Parra, instructora de la Arquidiócesis de Panamá, el uso del MOB refuerza la autoestima de la mujer, fomenta la responsabilidad compartida de la pareja y promueve el respeto a la vida desde la concepción.
Aseguró que mejora la comunicación y permite redescubrir el sentido del don de la sexualidad.
“El método ofrece frutos espirituales y humanos, permite conocer el ciclo femenino como expresión de la creación de Dios. Enseña a respetar y custodiar la fertilidad como un don y a decidir, con discernimiento y oración, cuándo acoger un hijo o cuándo posponerlo”, afirmó.
Adecuado para todas las etapas
El Método Billings puede aplicarse en cualquier etapa reproductiva de la mujer, desde la pubertad hasta la premenopausia. Resulta útil durante la lactancia, para lograr o espaciar embarazos y para vigilar la salud reproductiva.
Toda persona interesada en aprender el método debe realizar un curso básico, compuesto por cuatro sesiones, donde se abordan sus fundamentos científicos, prácticos y doctrinales. Luego, recibe un acompañamiento personalizado por al menos tres meses con un instructor acreditado. Los interesados pueden seguir en Instagram: @billingspanama y @serplafan
