La peregrinación une a las comunidades franciscanas de América Latina en oración por la paz mundial.
Marianne Colmenárez
La Virgen Peregrina de Nazareth, junto a la reliquia de la casa de María de la Basílica de la Anunciación ubicada en Israel, se encuentra en tierras panameñas desde el 1 de septiembre, recorriendo diversas comunidades franciscanas.
La imagen inició su peregrinación en la parroquia San Juan Bautista de Boquete y posteriormente visitó la parroquia Nuestra Señora del Carmen en la ciudad de David. Más adelante fue recibida por los fieles de la diócesis de Penonomé y del 13 al 15 de septiembre permanecerá en la parroquia San Antonio de Padua de Miraflores, en la Arquidiócesis de Panamá.

Vivian Cianca, de la Orden Franciscana Seglar, explicó que esta iniciativa tiene como propósito unir a los fieles de América Latina con la experiencia espiritual de Tierra Santa.
“Es una réplica de la imagen venerada en la Basílica de Nazareth. Ha peregrinado por México, Guatemala, Honduras, Costa Rica y ahora, en septiembre, está recorriendo Panamá en las comunidades franciscanas” expresó.
La peregrinación representa una oportunidad para todos aquellos que anhelan acercarse a las tierras donde vivió Jesucristo. En cada etapa se invita a los fieles a unirse en oración, pidiendo especialmente por la paz en un mundo marcado por conflictos y divisiones.
