El Día Mundial del Turismo se conmemora el 27 de septiembre y en este Año Jubilar se destaca el tema de la transformación sostenible. En este marco, la Iglesia aprovecha la oportunidad para reflexionar sobre la relación entre el viaje, el cuidado de la creación y la promoción humana.
Karla Díaz
La Pastoral de Turismo de la Arquidiócesis de Panamá, coordinada por la profesora Carmen Carrasquilla, anunció que este domingo 28 de septiembre, a las 8:00 de la mañana, se celebrará la Eucaristía por el Jubileo del Turismo, presidida por Mons. José Domingo Ulloa Mendieta, arzobispo de Panamá.
“Queremos congregar a todos los que trabajan dentro del sector turismo, las comunidades de base, empresas privadas, gremios, universidades y asociaciones de guías, porque el turismo también es un camino de evangelización y encuentro humano”, explicó Carrasquilla.
La celebración se inspira en el Día Mundial del Turismo, que se conmemora el 27 de septiembre y que este año subraya el tema de la transformación sostenible. Para la Iglesia, esta fecha es una oportunidad para reflexionar sobre la relación entre el viaje, el cuidado de la creación y la promoción humana.
El compromiso es vivir un turismo con alma, responsabilidad y fe.
Turismo con responsabilidad cristiana
La coordinadora de la pastoral recordó que el turismo “no se limita al entretenimiento, sino que abre puertas al encuentro, crecimiento humano y espiritual, y al respeto de la Casa Común”.
El enfoque de la celebración apunta a la sostenibilidad integral, que no solo abarca el aspecto ambiental, sino también las dimensiones cultural, económica y espiritual.
“Cada operador turístico tiene una misión que es transformar, de manera positiva, la actividad del turismo, incorporando valores de respeto, responsabilidad y cuidado de la creación”, añadió Carrasquilla.
Una pastoral joven y en crecimiento
La Pastoral de Turismo en Panamá se encuentra en proceso de consolidación. En otros países ya existen experiencias exitosas, que integran la espiritualidad con la atención a turistas y peregrinos, en parroquias y comunidades.
Sin embargo, en Panamá aún se trabaja en la formación de agentes pastorales, el fortalecimiento de equipos en parroquias y la articulación con otras pastorales para asumir los retos que plantea la realidad local.
“Tenemos desafíos, pero también la certeza de que podemos organizarnos y crecer. El turismo no solo es motor económico, también es espacio de evangelización y promoción humana”, destacó la coordinadora.
La invitación está abierta para que todos los actores del sector turístico y las comunidades se unan a esta celebración jubilar, reafirmando el compromiso de vivir un turismo con alma, responsabilidad y fe.
