El Adviento es el tiempo de preparación para la Navidad. ¿Cómo podemos prepararnos para esta fecha tan especial? En los grupos juveniles resulta una oportunidad muy especial para compartir como hermanos y reflexionar sobre este tiempo de Adviento, comprendiendo que el camino de María hacia el preciso instante del nacimiento de Jesús se transforma en una serie de catequesis vitales para nuestro conocimiento espiritual y así comprender por qué se dieron las cosas de tal forma que Jesús nos dio una lección de humildad desde el inicio.
Es de vital importancia que los grupos juveniles aprovechen esta fecha para tener formaciones específicas sobre el Adviento, el significado de las velas, el motivo de reflexionar un aspecto peculiar cada semana y cómo este tiempo litúrgico supone un verdadero regalo de reflexión y unidad. Recibir la Navidad no se trata sólo de tener una casa adornada o regalos, sino de tener un corazón dispuesto a dejar nacer a Jesús con un sentir de alegría, gozo y amor. Por eso, la invitación hoy es clara, vivamos el Adviento en comunidad. Compartamos como la familia que somos y organicemos formaciones sobre este tiempo, hagamos la reflexión semanal de la Corona en un ambiente de alegría y dispongamos nuestro corazón a vivir esta dulce espera con toda la intención de crecer espiritualmente y recibir la Navidad con su verdadero significado bien remarcado: somos un pueblo que está a la espera del Salvador, del Mesías, que se manifestó en Belén al nacer en un humilde pesebre. Si logramos captar este mensaje previo a la Navidad, sabremos que reflexionar durante 4 semanas de Adviento ha sido un regalo de Dios para estar en sintonía con esta fiesta tan especial.
