En días pasados la Diócesis de Colón convocó por segundo año consecutivo la Asamblea Diocesana de Pastoral en la casa de retiro Tiberiades. Allí se discutió el plan pastoral diocesano, que busca renovar y actualizar el caminar de la Iglesia en Colón.
En esta reunión se hicieron presentes agentes representativos de los diversos niveles y sectores de la Iglesia, y fue convocada y presidida por el Obispo Manuel Ochogavía. En la primera convocatoria se buscó impregnar en los participantes una espiritualidad de comunión, buscando las luces y sombras desde una mirada retrospectiva del caminar de la Diócesis desde los últimos 20 años, y en ella buscar las ideas fuerzas para ir renovando la realidad como Iglesia.
Se les pidió a las parroquias y movimientos desarrollar a través de un cuento, canto o fábula los aportes para el modelo ideal de Iglesia; la Iglesia que Dios quiere y que es tarea de todos construir.
La encargada de dirigir por segundo año esta asamblea fue la hermana María Lidia González, junto al equipo diocesano de animación pastoral.
Acompañó también el Padre Elkin Núñez, Vicario Pastoral, quien manifestó que el trabajo desde el inicio no ha sido fácil y que estructurar un plan pastoral no es cuestión de una reunión de un día, sino un proceso que puede durar tres años o más, dependiendo de las aportaciones que realicen los sacerdotes y sobre todo los laicos.
“Son los laicos los que tienen la mayor responsabilidad de colaborar con sus experiencia desde las diferentes realidades parroquiales y vivencias en sus comunidades”, dijo.
Agregó que no es terminar este proceso con el Diagnóstico Pastoral, y que todo quede allí, sino que al realizar este paso se pueda seguir con el trabajo y darle la debida realización en las parroquias y comunidades.
