La Iglesia San Atanasio de la Villa de los Santos, luego de reunir esfuerzos y con la ayuda de instituciones y personas de buena voluntad, ha logrado la restauración total del techo del templo, que por el pasar de los años, el clima y otros factores, se había deteriorado.
La ejecución del proyecto se inició el 3 de febrero del presente año, pero para iniciar la ejecución tuvieron que cumplir con una serie de requisitos exigidos por la Oficina de Patrimonio Histórico del INAC.
Los trabajos tuvieron una duración de 130 días, en los cuales el pueblo y la administración parroquial tuvieron que contratar a diferentes empresas con experiencia en restauración a nivel nacional.
Pero también se recibió el apoyo del pueblo, pues mientras los trabajos se hacían en el templo, muchas familias recibieron en sus hogares varias imágenes de Santos que resguardaron con mucho cuidado y amor.
El proyecto en sí, consistió en restaurar la cubierta del techo, de la cual desmontaron todas las tejas y removieron la felpa existente, para después eliminar las piezas deterioradas de madera.
Después de terminada esta actividad, se impermeabilizó toda la cubierta del techo con la membrana asfáltica, producto recomendado y exigido por la oficina de Patrimonio Histórico, quienes mantenían una inspección constante.
Se aprovechó también para instalar las conchas nácar en la torre del campanario, que antiguamente tenía una importante función de proyectar luz, dándole una vistosidad especial.
Como en todo proyecto, encontraron diferentes dificultades como paneles de abejas africanizadas, piezas de madera estructurales en mal estado, por lo que tuvieron que reemplazar las mismas.
Pero también encontraron impresiones en teja y maderas de otras restauraciones que se han hecho, que dejaron ver que la cubierta de la Iglesia de San Atanasio es un museo activo que funciona y es valorado por la comunidad. Esta cubierta es única en su clase con 5 naves, 4 hiladas de columnas, su techo presenta tres declives diferentes, dando la impresión de un arqueamiento, propio del estilo Mudéjar.
La obra de restauración ha sido posible gracias al trabajo incansable de los miembros de la parroquia, ya que la feligresía sufría los daños significativos, especialmente en esta área del techo del templo, que se afectaría más, si se dejaba pasar más tiempo sin hacer algo al respecto.
La reapertura fue el miércoles 14 de junio con la presencia del Nuncio Andrés Carrascosa, Mons. Rafael Valdivieso y el Clero Diocesano.