No solo sostiene la fe de los adoradores que asisten constantemente; también es semilla que germina en sus hogares.
Por Marianne Colmenárez
Mientras la ciudad duerme y el bullicio se apaga, un grupo de laicos comprometidos acompaña, entre oraciones y ratos de silencio, al Santísimo Sacramento.
Lo hacen por amor, en reparación y desagravio, sosteniéndose solo en la esperanza de que su plegaria alcance a quienes no oran y, a su vez, alivie las penas del mundo.
Son los miembros de la Adoración Nocturna Panameña, una asociación que, desde hace casi 75 años, “mantiene viva una llama que transforma vidas y familias”. Así lo manifestó Guillermo De León, actual presidente de esta misión.
Recuerda que, después de 19 años de perseverancia, este encuentro mensual con Jesús Eucaristía ha sido el pilar que lo ha sostenido en los momentos más difíciles. “Me ha ayudado a cargar mi cruz”, expresó, reconociendo que el mismo Jesús sigue dando forma a su vida.
Bajo su liderazgo, se está impulsando una reforma al reglamento para formalizar la incorporación de las damas, lo que promete renovar y enriquecer esta asociación.
“ Vengan a mí todos los que están afligidos y agobiados, y yo los aliviaré” (Mateo 11, 28).
Un espacio que fortalece la familia
El sacerdote claretiano Eduardo Alfaro, vicario del Santuario Nacional y acompañante espiritual de los adoradores, destacó el impacto transformador de este encuentro mensual con el Santísimo Sacramento.
“Las familias se fortalecen, crecen en la fe y tienen más calma ante las dificultades. No son soluciones mágicas, simplemente el Señor hace su obra”, expresó.
También informó que, por grupos, se reúnen en la capilla de Fátima del Santuario Nacional del Corazón de María, los jueves, vísperas del primer viernes de cada mes. Inician a las 7:00 de la noche con la santa misa y culminan el viernes a las 5:30 a.m.
El padre Eduardo explicó que los cambios recientes, como la incorporación de mujeres, son una respuesta a la evolución de la Iglesia en medio de los cambios del mundo.
“No puede pasarnos por la cabeza la idea de que un grupo antiguo como este desaparezca, más bien hay que ayudar a que evolucione, de acuerdo con la realidad y circunstancias”, expresó el sacerdote.
La inseguridad, el tráfico, la edad de sus miembros y el desafío de la movilidad, ha afectado la asistencia en cada encuentro. Sin embargo, aclaró que hay un grupo de adoradores que mantiene el compromiso de asistir a la vigilia.
Testimonio de fidelidad
Ricardo Díaz, de 77 años, lleva 40 en esta misión. Afirmó que aun cuando la pandemia obligó a suspender temporalmente las vigilias presenciales, encontró en la virtualidad una forma de seguir cerca del Santísimo.
Su testimonio va más allá del compromiso personal; ha sido un puente de fe para su esposa, sus hijos y ahora para sus nietos.
“En el año 2011, el Señor hizo un milagro en mí; tenía un tumor en el páncreas y me dio una septicemia, no tenía muchas esperanzas de vida. Le dije a Dios: en tus manos estoy, Tú decides, y aquí sigo, con la misión de continuar apoyando a mi familia, orando por la salud de otros, confiando de que el mismo Jesús camina con nosotros”, dijo Ricardo, coordinador del grupo número 7 de adoradores.
Próximas vigilias 2025
JUNIO: jueves 5
JULIO: jueves 3
AGOSTO: jueves 31
SEPTIEMBRE: jueves 4
OCTUBRE: jueves 2
NOVIEMBRE: jueves 6
DICIEMBRE : jueves 4
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