La detección temprana es la mejor defensa contra el cáncer

La detección temprana es la mejor defensa contra el cáncer

Disminuir el riesgo contra el cáncer de mama es posible. Entre algunas recomendaciones están: realizar actividades físicas y mantener un peso adecuado.

Diamar Díaz Nieto

Octubre es el mes dedicado a la prevención y diagnóstico temprano del cáncer de mama. Este año el lema de la campaña de la Cinta Rosada es “Uniendo fuerzas contra el cáncer”, para sensibilizar sobre este padecimiento que es la primera causa de decesos en mujeres de Panamá.

Datos estadísticos, obtenidos a través del Instituto Oncológico Nacional, revelan que en 2015, se registraron 675 casos; mientras que, en 2019, el número aumentó a 971 y a inicios de 2020 se habían confirmado 403 casos de cáncer de mama.

La aceptación y fortaleza sostenida en Dios es bálsamo en medio de la adversidad.

“Casi todos tenemos una historia que contar sobre el cáncer de mama, la pandemia nos ha golpeado muy duro, pero no nos puede distraer de esta responsabilidad,” destacó la Primera Dama de la República, Yazmín Colón de Cortizo, en el acto de apertura de la campaña de la Cinta Rosada.

El ministro de Salud, Luis Francisco Sucre, invitó por su parte a efectuarse un autoexamen en primera instancia y una mamografía preventiva, ya que puede marcar la diferencia.

CAMPAÑAS. Equipos de de la CSS y conciencian sobre el COVID y en cáncer de mama.

Aunque la palabra cáncer puede disparar ansiedad, en quien recibe el diagnóstico, el contar además de la atención médica – que es primordial-   la aceptación y la fortaleza sostenida en Dios, ha sido un bálsamo que les invita a luchar a muchas féminas, al punto de convertirse en unas guerreras, afirmando como en Filipenses 4, 13 «Todo lo puedo en Cristo que me fortalece».

Se puede reinar en la cruz

Gran parte de la vida de Marisela Moreno ha estado rodeada de las luces de los reflectores, fue modelo, Miss Panamá; por un periodo de cinco años fue la directora del certamen más prestigioso de nuestro país, Señorita Panamá, siendo en éste y otros aspectos, una profesional exitosa.

En su vida familiar es esposa y madre amada de sus dos niños. Aún recuerda que sus días de trabajo resultaban intensos, con jornadas laborales que superaban, en muchas ocasiones, las doce horas. Aunque manejaba una apretada agenda, sus mañanas comenzaban con el rezo del Rosario y asistir a Misa.

“Llevaba una vida sumamente agitada, claro que sí, llevaba una vida religiosa – espiritual, iba a Misa, es más, recuerdo que sin la misa diaria no podía lograr mis objetivos diarios. Me exigía mucho y vivía mi vida en el hacer”, expresó.

MAMOGRAFÍAS. Pueden salvar su vida.

Todo indicaba que tenía una vida de ensueño, pero un día todo cambió cuando al efectuarse un autoexamen descubre un bulto en su seno, que tras realizarse las pruebas médicas, conoce que era cáncer de mama.   

Reconoció que cuando recibió la noticia estaba bastante asustada, y pasó por su duelo de lágrimas, pues al haber sido Miss Panamá, el tema de la belleza le resultaba importante.

Detalló que leía la Palabra, rezaba el Rosario y no es que estuviese fuera de la parte espiritual; no obstante, indicó que a veces como cristianos tenemos que pasar por ciertos procesos, y que muchas veces le llamamos castigo, pero no lo son, sino que esos cambios nos ayudan a evolucionar como personas y en nuestra fe.

Datos de interés
  • El cáncer de mama es un tumor maligno (canceroso) que se origina de las células del seno, revela la página web de Fundacancer.
  • Esta enfermedad ocurre principalmente en las mujeres, pero los hombres también pueden desarrollarlo.
  • El cáncer de mama es el más común entre las mujeres en Panamá y es una de las principales causas de muerte en las mujeres.

En medio de la tormenta, fue precisamente esa fe la que sustentó en cada una de las etapas. Recordó que en una ocasión conversando con un sacerdote amigo le dijo: “Marisela, Cristo es un hombre seguro de sí mismo, es un tipazo, Él se paró bonito, que, en medio de todo, Él iba erguido y estaba en una seguridad en sí mismo ante todas las dificultades”.

Confirmó que siempre ha creído en esas palabras, al punto que se convirtió en su filosofía de vida, porque Dios le enseñó a reinar, pero con su propia historia.

“En ese momento entendí que yo iba a vivir esta enfermedad reinando en victoria, porque soy hija consentida de Dios y sabía que él no me iba a dejar caer”, subrayó.

CONCIENCIA. El 1 de octubre comenzó la campaña de la Cinta Rosada y Celeste.

El tratamiento no fue fácil, perdió cabello, uñas, pestañas y su piel estaba bastante quemada por las radioterapias.

La expresentadora de televisión señaló que cualquiera de las decisiones que Dios hubiese tenido con ella, ya sea, el haber fallecido, o la que se le concedió, la gracia de vivir, la aceptaba. Empero, reconoce que entre las misiones que Dios le dio al permitirle seguir con vida, es enseñarle al mundo que sí se puede reinar en medio de la cruz.

Además de contar con excelentes doctores y enfermeras, la parte espiritual nunca fue descuidada, y buscaba ir al Santísimo, a Misa y cuando las fuerzas la mermaban y su cuerpo estaba con tan solo un 20%, ella rezaba el Rosario aun acostada en su cama.

El momento fue propicio para ponerse al día con muchas decisiones, entre ellas ser agradecida. “Yo empecé a agradecer que tenía piernas, manos, que podía caminar, ver, escuchar, tomarme un sorbo de café… agradecer cosas tan sencillas que antes daba por hecho”, aceptó.

REALIDAD.El cáncer no hace cuarentena, las pacientes no pueden esperar tratamiento.

También dio paso al perdón. “En ese momento te das cuenta que lo más importante es vivir y nada vale la pena que le ponga tanta atención. Entonces perdona para ser más libre”, agregó.

Admitió la importancia de amar, de amar mejor a su esposo, hijos, a toda esa gente que llegaba a darle ánimos y sobre todo, amarse a sí misma. “Comprendí que yo era un ser humano que también tenía derecho de amarme, a respetarme, a respetar mis tiempos de descanso, mi tiempo de trabajo que no debían ser de 12 a 16 horas de trabajo, porque yo no era una súper mujer, sino que soy hija de Dios”, concluyó.