Iniciativas comunitarias generan una conciencia ecológica y aportan soluciones sostenibles en sus entornos parroquiales.
Por Marianne Colmenárez
Reciclar es mucho más que una acción ambiental. En algunas comunidades, se ha transformado en una experiencia evangelizadora, educativa y profundamente espiritual. Así lo demuestran las iniciativas que se desarrollan en parroquias como Saint Mary’s en Ancón, San Juan Apóstol en Brisas del Golf y Nuestra Señora de Los Dolores en Tocumen.
Para estas comunidades, el 17 de mayo, Día Nacional del Reciclaje, no solo apunta a fortalecer la cultura del reciclaje, sino que invita a una intensa reflexión sobre las prácticas cotidianas y una oportunidad para actuar conforme al llamado del papa Francisco en su encíclica Laudato Si’: cuidar de la Casa Común con acciones concretas.
Una de estas acciones nace en la parroquia Saint Mary’s, en Balboa, Ancón, donde el Movimiento Laudato Si’ impulsa un proyecto novedoso: la elaboración de bancas ecológicas con botellas plásticas recolectadas por la comunidad.
“Este proyecto comenzará oficialmente el 17 de mayo. Ya estamos recogiendo internamente los desechos y buscando un proveedor para construir las bancas”, explicó Lobelia Aguilar, laica comprometida y una de las responsables de esta iniciativa.

Para Anna Bieberach, también fiel de la parroquia, las bancas, hechas con las botellas descartadas por la misma comunidad, serán mucho más que mobiliario; se convertirán en un símbolo tangible del compromiso ecológico y espiritual.
“Con este proyecto tocamos el sentido de la economía circular y del cuidado de lo que Dios ha creado”, aseguró.
Visualizan futuras etapas para el proyecto, como la elaboración de bancas que puedan ser adquiridas por los feligreses para los jardines de sus hogares. También contemplan replicarlo en comunidades apartadas, donde no existe un sistema de recolección de basura, pero sí una alta acumulación de desechos plásticos.
“En estos lugares, el proyecto podría ofrecer una solución para equipar capillas o escuelas con mobiliario útil, al tiempo que se convierte en una fuente de empleo y desarrollo comunitario”, dijo Lobelia.
El primer domingo de cada mes, Hogar Eco OBC, realiza jornada de reciclaje en la barriada Palo Alto, ubicada después de Megamall, de 10 a.m. a 1 p.m.
Brisas que inspiran

En la parroquia San Juan Apóstol, ubicada en Brisas del Golf, el reciclaje es una práctica sostenida desde 2015.
Motivados también por la encíclica Laudato Si’, comenzaron con jornadas ecológicas el último domingo de cada mes, en las que recolectan más de una tonelada de materiales.
Mayra Barahona, junto a Kathia Rodríguez de la Pastoral Social, relatan que actualmente reciben una gran variedad de residuos: papel, vidrio, metales, plásticos, cartón y aceite de cocina usado.

Este último se transforma en biodiesel, gracias a la colaboración con la empresa Hogar Eco OBC, alineándose al Decreto Ejecutivo 270 de 2013, que regula el uso del aceite vegetal usado en Panamá.
El transporte de los residuos, que alguna vez fue gratuito, hoy tiene un costo mensual que asumen entre la parroquia y la misma pastoral. Sin embargo, el esfuerzo no disminuye.
“Ya hay más conciencia. Los fieles llegan antes de misa con sus desechos limpios y escurridos. Algunos, incluso, traen ropa que clasificamos y donamos a familias vulnerables, también se envía al Darién”, añadió Kathia.
La parroquia San Juan Apóstol realizará su próxima jornada de reciclaje el 25 de mayo, de 9:00 a.m. a 12:00 m.d.

Animadores Ecológicos
Desde Tocumen, en la capilla San Roque de la parroquia Nuestra Señora de Belén, Diana Mudarra relata cómo, tras la Jornada Mundial de la Juventud 2019, surgió la Pastoral de Ecología Integral.
“Nos dimos cuenta de que la ecología también podía ser una forma de evangelizar. Creamos un grupo de animadores ecológicos para sensibilizar a la comunidad”, explicó.
Desde entonces, han realizado innovadoras iniciativas, como la creación de ladrillos con botellas plásticas que sirvieron para cimentar un huerto en la comunidad, han organizado jornadas de limpieza de llantas y recolectan aceite de cocina usado que también entregan a Hogar Eco OBC, a cambio de dinero que utilizan para otras iniciativas.
Según datos de Hogar Eco OBC las parroquias con mayor recolección entregan unos 2,119 litros de aceite usado al año, lo que equivale a evitar la contaminación de aproximadamente 2,119,000 litros de agua.
Para Diana, este Día Nacional del Reciclaje, es vital recordar que la protección de nuestra Casa Común no es solo responsabilidad del Estado o de las empresas. “Como cristianos, debemos ver el reciclaje como un acto de fe y de amor por la creación”.