Como matrimonio creyente, regálense un nuevo despertar con las mismas fuerzas de la primera vez.
Por Marianne Colmenárez
En la turbulencia de la vida cotidiana, los matrimonios a menudo se encuentran atrapados en una rutina que deja poco espacio para el crecimiento espiritual y la intimidad emocional.
Las responsabilidades del trabajo, las obligaciones familiares y las demandas diarias pueden erosionar lentamente la conexión que una vez fue el fundamento de una relación sólida.
En este contexto, un retiro espiritual en pareja se presenta, no solo como una pausa necesaria, sino como una oportunidad invaluable para renovar la fe compartida y revitalizar la intimidad.
“Hace falta tiempo para dialogar, para abrazarse sin prisa, para compartir proyectos, para escucharse, para mirarse, para valorarse, para fortalecer la relación”, expresa el Santo Padre en su exhortación Apostólica Amoris Laetitia, en el numeral 224.
En sintonía con esta afirmación, Mabel Montero de Fernández, coordinadora nacional de la Pastoral Familiar, asegura que estos momentos de reflexión y oración conjunta no solo fortalecen la unión entre los esposos, sino que también les permiten redescubrir la belleza de su compromiso y renovar su amor con la gracia de Dios.
En un retiro, las parejas pueden profundizar en su comunicación, resolver conflictos pendientes y reforzar su espiritualidad matrimonial.
En Amoris Laetitia, el papa Francisco nos recuerda la importancia de que las parejas tomen tiempo para sí mismas y su relación.
Mabel comparte que, ella y su esposo Octavio tuvieron la oportunidad de vivir el retiro espiritual: El esplendor del vínculo de Matrimonios en Victoria.
“Esos momentos son necesarios, ya tenemos 28 años de casados y está en nosotros acercarnos a la fuente del amor divino para mantener viva y vibrante la llama. Todavía no hemos hecho el retiro del movimiento Encuentro Matrimonial, pero lo hemos recomendado, viendo muy buenos resultados en las parejas que lo viven”, destaca.
Salir de la rutina y las responsabilidades

“Cuando aceptan ir a uno, es muy posible que al principio del retiro se sientan incómodos y deseen retirarse, pero deben tener paciencia y abrirse a la acción de Dios”, señala Octavio Fernández.
Un retiro espiritual hace realidad ese milagro de conseguir la paz, en esos días se puede pensar con calma en lo importante y poner en orden las ideas: familia, trabajo, vida cristiana, amistades.
¿Está cada cosa en su sitio? ¿Tengo que redimensionar algún aspecto de mi vida?, es necesario detenerse para pensar y ver como pareja de dónde vienen y a dónde van.
Octavio y Mabel aseguran que, con la gracia de Dios, con las orientaciones del sacerdote y de los laicos responsables de la experiencia, podrán cambiar lo que haya que cambiar; mejorar lo que haya que mejorar.
“Regresarán a casa, a la realidad que dejaron, en la que tendrán que poner manos a la obra; pero van renovados y con las herramientas aprendidas”, resaltó Octavio.
Opciones para enriquecer tu relación de pareja
A través de sus redes sociales, el Movimiento Matrimonios en Victoria informa los detalles del retiro “El Esplendor del Vínculo”. Es un fin de semana dedicado a renovar el vino de su amor y crecimiento en la fe.
Los días 27 y 28 de julio se celebrará en la Casa de Retiro Monte Alverna de la Arquidiócesis de Panamá. Asimismo, quienes deseen participar en la diócesis de Chitré, el retiro se realizará el fin de semana del 31 de agosto y 1 de septiembre, en el Centro de Retiro Damasco. Pueden establecer contacto escribiendo al correo: [email protected].
El Encuentro Matrimonial Panamá tiene contemplado realizar durante el fin de semana del 17 y 18 de agosto en la diócesis de David y el 21 y 22 de septiembre en la diócesis de Colón, un retiro diseñado con el propósito de renovar la relación mediante una experiencia profunda para ser mejores esposos, padres, para escuchar con el corazón y volverse a ilusionar. Los interesados pueden llamar o escribir al WhatsApp 6776-5511.