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Trasladan reliquias a nuevo sepulcro

Trasladan reliquias a nuevo sepulcro

El pasado miércoles 18 de julio se celebró la misa en sufragio de la Sierva de Dios Ana María Moreno del Castillo en la Iglesia de San Atanasio en La Villa de Los Santos

Las reliquias de la Sierva de Dios fueron transportadas por los seminaristas del propedéutico del Seminario Santa María la Antigua de las Villa, hasta la Iglesia. En el atrio, el Padre Emilio González, Vicario del templo y delegado del Obispo para vigilar el buen desarrollo de exhumación de la Sierva de Dios, recibió las reliquias con las oraciones correspondientes.

Los hermanos del apostolado de la Oración del Sagrado Corazón de Jesús condujeron las reliquias hasta el altar cantando el himno “Corazón Santo, tú reinaras”, pues Ana María Moreno, fue presidenta de esta asociación por muchos años.

Una vez las reliquias fueron colocadas delante del altar, se celebró la oración de vísperas por los difuntos, especialmente por Ana María, cantadas por el coro parroquial y los fieles.

Seguidamente, Monseñor Rafael Valdivieso Miranda celebró la eucaristía en sufragio por el eterno descanso de la Sierva de Dios y todos los difuntos. En su homilía recordó el testimonio de la Madre Teresa de Calcuta que lleva a plenitud la santidad a través de las obras de misericordia y la caridad cristiana.

Al terminar la Eucaristía las reliquias fueron bendecidas con agua bautismal e incensadas por la dignidad de bautizada ungida por el Espíritu Santo, y porque en la tierra formó parte del cuerpo material de la iglesia.

Caja de mármol

El padre Pedro Moreno postulador de
la causa de beatificación y canonización explicó
a todos, el procedimiento de reconocimiento de los restos, exhumación y traslado de las reliquias, mencionando las instituciones del estado que participaron de esta obra de más de un mes de trabajo. La razón principal por la que se realiza la exhumación es porque en el cementerio de la Villa de Los Santos existen filtraciones de agua subterráneas que mantienen las sepulturas inundadas, así como un enorme árbol que había hundido sus raíces en dicha sepultura.

Terminadas las explicaciones los seminaristas condujeron las reliquias hacia el nuevo sepulcro que está ubicado a un costado de la capilla bautismal de la iglesia San Atanasio.

La nueva sepultura se bendijo, y el notario actuario del tribunal para la exhumación leyó el acta que se encuentra junto a las reliquias y junto a una caja de mármol.

El Obispo junto a los seminaristas y los ayudantes introdujeron la caja con las reliquias de la Sierva de Dios y la sepultura fue sellada en presencia de todo el público.