Con la pandemia, la fiesta en honor al Cristo de Esquipulas ha tenido que modificarse y hasta replantearse para mantener viva esta devoción.
Eric Soto/ Parroquia de Antón
Se cumplen más de 300 años de celebración de la fiesta patronal en honor al Cristo de Esquipulas de Antón. En todos estos años, la celebración tenía un matiz de unión comunitaria. Desde lejos, cada comunidad llegaba con sus anditas para reunirse en su sede parroquial desde el 5 de enero y juntos como hermanos compartir cada día de novena a partir del 6 de este mes.
Con la pandemia todo esto ha tenido que modificarse y hasta replantearse para mantener viva esta devoción.
Ha sido un tiempo muy difícil, que esta relación con Dios por medio de la imagen del Cristo se encuentre distante, necesitamos sentir esa cercanía.
Este año, muchas comunidades no han podido participar de la tradicional romería con imágenes del Cristo en andas pequeñas. Se les conoce como «los esquipulistas».
Este año, una pequeña delegación salió de la comunidad de Los Pantanos, el pasado 5 de enero, rememorando la aparición de la milagrosa imagen del Cristo de Esquipulas.
Como es tradicional, el recorrido se hace a pie. La delegación llegó hasta la entrada principal del templo parroquial San Juan Bautista de Antón, y allí fueron recibidos por el párroco, Teobaldo Quiroz.
Este tiempo deja sentimientos encontrados, lo acostumbrado ver a miles de personas caminar por las calles hacia el templo a ver al Cristo ha cambiado.
Cumpliendo las medidas de bioseguridad y guardando los distanciamientos requeridos por el Ministerio de Salud, solo ingresaron al templo los que conformaban la delegación, y con su presencia fueron testigos de la tradicional entrega de la imagen al presbítero.
El padre Teobaldo Quirós pidió a los fieles orar para que termine esta pandemia que está afectando a nuestro país y al mundo. Aprovechó el momento para dirigir un mensaje a la población y tomar conciencia de la delicada situación de salud.
Las novenas han sido transmitidas por las redes sociales a través de la cuenta @psjbanton.
El párroco en Antón llamó a cuidarse unos a otros como hermanos e invitó a participar de la fiesta patronal de manera virtual. “Los devotos podrán seguir la fiesta religiosa a través de las plataformas digitales de la parroquia y en medios de comunicación como Radio María y Radio Mi Favorita”, informó.
Este año, el lavatorio de pies y los cambios de ornamentos a la imagen del Santo Cristo de Esquipulas de Antón se llevaron a cabo bajo estrictas medidas de bioseguridad.
En esta fiesta del santo Cristo de Esquipulas es importante tener siempre una fe verdadera y auténtica, que brote del corazón de cada uno.
Al respecto, el padre Teobaldo aclaró que “solo se llevó a cabo el lavatorio a la imagen del santo, se le cambió el sudario, cabellera y las potencias, antes se celebró la santa Eucaristía”.
Fray Anel Gálvez OSA. asegura que, de Dios por medio de la imagen nos recuerda su entrega en la cruz y su sacrificio por nosotros. “Vivimos una pandemia, pero no una crisis de fe”, dijo.
El religioso agustino señaló que esta fiesta nos recuerda la importancia de vivir una fe centrada en Cristo, el único que puede transformar nuestras vidas y nuestro corazón.
Alexander Betancourt, feligrés de esta parroquia, advirtió que estamos llamados a cuidar y preservar nuestra salud y la de nuestros hermanos, confiados en que el Cristo Esquipulas nunca nos abandona. “Tenemos la esperanza que el próximo año podamos reencontrarnos y celebrar junto a los devotos del santo Cristo de Esquipulas, que vienen de distintas partes del país.
Algo de Historia del Cristo de Esquipulas
Parte de su festejo recae en recordar el origen de esta devoción. La leyenda más persistente es que pescadores, oriundos de la comunidad de Los Pantanos de Antón, divisaron una caja que encontraron flotando en el mar.
Se cuenta que, al acercarse a la caja, y dudando de lo que pudiese contener dentro, deciden llevarla al sacerdote en La Ermita en Antón. En presencia de todos allí se abrió la caja y descubrieron entonces la imagen del Cristo de Esquipulas que tenía como destino Esquipulas Guatemala, pero a causa de un naufragio cerca de las costas antoneras y desde entonces se quedó en estas tierras.
Cuentan los habitantes de esta tierra, que un sacerdote del distrito de Penonomé intentó llevarse la imagen, pero fue sorprendido cuando vio que el peso de la imagen hacía imposible su traslado. Para los residentes de este distrito de Antón, esto significó que el Cristo Esquipulas debía quedarse en medio de este pueblo. A la imagen se le atribuye muchos milagros.
