,

Descubre la luz en los otros  

Descubre la luz en los otros  

“Cuando estemos frente a esos hermanos “distintos” tratemos de visualizar que en su pecho brilla una luz divina, un pedacito de Dios”.

 

El Antiguo Testamento (1Samuel 16, 1b. 6-7. 10-13a) y el Evangelio (Juan 9, 1-41) intentan abrirnos los ojos sobre el verdadero valor del ser humano y qué es lo que debemos buscar en el hombre y la mujer; lo que de verdad debemos tomar en cuenta para dejarlos entrar en nuestras vidas, y entrar en la de ellos. 

Pero, muchos de nosotros juzgamos a los demás por cómo se ven, en qué auto viajan, qué tipos de zapatos o de camisas usan; si llevan prendas de kilates, o por cómo huelen. 

Esta semana sugerimos como tarea, salir al encuentro de alguien que, por su apariencia, nos disgusta y rechazamos.

Vamos a darnos la oportunidad de escucharlos, de indagar cómo piensa, qué tiene en el alma y por qué Dios se tomó el trabajo de hacerlo su hijo y ponerlo en nuestro ambiente.

Cuando estemos frente a esos hermanos “distintos”, a quienes tal vez nosotros consideremos “insignificantes”, tratemos de visualizar que en su pecho brilla una luz divina, un pedacito de Dios. Entonces comprenderemos que no importa qué ropa usa ni cómo se peina, sino quién es en realidad: una expresión del Creador.

Abramos los ojos a lo verdaderamente importante. Muchos estamos ciegos a esta verdad de que todos, por más pequeño y excluido que sea, comparte con nosotros algo de la Divinidad.