Viajó en piragua por horas, luego por carretera para celebrar el cumpleaños de su hija mayor. Con el apoyo de las Hermanas Oblatas fue posible vivir tan inolvidable momento.
Por Marianne Colmenárez
Maryis Porpare es una jovencita indígena, de la Comarca Emberá-Wounaan de Darién. Vive desde inicio de este año en el Centro de Formación para la Mujer, una obra de misericordia de las Hermanas Oblatas del Corazón de Jesús.
Como la mayoría de las niñas que llegan al centro, vive ese proceso de adaptación en medio de temores, inseguridades y de la tristeza de dejar a sus padres. Nunca había viajado a la Ciudad de Panamá, siendo de Sinaí solo había llegado hasta Metetí.
Sin saber ningún detalle, su papá Henry Porpare venía ahorrando lo más que podía para viajar con cuatro de sus seis hermanos hasta Panamá. La sorprendieron con una sencilla, pero inolvidable fiesta para agasajarla por sus 16 primaveras.
Todo un desafío
Aunque los planes no salieron como quería, Henry se montó en su piragua con sus niñas de 4, 10, y 14 años de edad y con el único hijo varón, quien aprovechó la celebración para festejar también sus seis años.
“Mi esposa Tamar está enferma y se quedó triste con mi hija menor, deseaban venir para compartir este momento que hemos organizado con mucho cariño para nuestra Maryis. Viajé en mi piragua durante tres horas y media, desde Sinaí hasta Puerto Limón; luego en chiva una hora y media hasta Metetí y después en bus, seis horas más hasta Panamá”, relató el orgulloso papá.
La hermana Doris Díaz, una de las religiosas de la obra, le apoyó acompañándole en los almacenes de la ciudad; adquirió todo lo necesario para la reunión, desde los globos, piñata, golosinas y el dulce.
Porpare exhorta a quienes puedan colaborar con la obra. «Sean solidarios y ayuden con lo que puedan» exhortó.
Cuenta Bancaria #04-08-01-100200-4 Banco General/ Asociación Hermanas Oblatas del Corazón de Jesús.
