Del Encuentro, a través de sus 46 años, han salido vocaciones sacerdotales y religiosas entre los jóvenes. Muchos aseguran que han tenido una experiencia profunda al participar en él.
Por Elizabeth Muñoz de Lao
Con novedades y enmarcado en el Jubileo de la Esperanza, la Iglesia realizó el Encuentro Nacional de Renovación Juvenil (ENRJ) 2025. Miles de jóvenes llegaron a Chitré en actitud de peregrinación para participar en la actividad, que comenzó el 6 de enero y culminó el domingo 9 de enero.
Según informó el padre Raúl De León, párroco de la iglesia Santo Domingo de Guzmán de Parita y coordinador de la actividad, por ser un Año Jubilar para la Iglesia, el Encuentro no se escapó de esa realidad. Por eso, el sábado 8 todos los jóvenes se congregaron en la Catedral San Juan Bautista, como templo jubilar, a las 6:00 p.m., donde participaron en un momento de adoración presidido por el obispo Rafael Valdivieso.
Allí conocieron lo que significa alcanzar la indulgencia, a fin de tener claro el concepto doctrinal de la Iglesia. Como el Encuentro estuvo enfocado en el tema del Año Jubilar, hubo momentos para la reconciliación, para la celebración de la eucaristía con fe viva todos los días, para adorar al Santísimo y rezar el rosario, todas ellas realidades espirituales del Encuentro Juvenil.
Hay que reconquistar a los jóvenes
Este año, se hizo un presupuesto estimado para 5,000 participantes, aunque después de la pandemia por COVID-19, muchas cosas cambiaron, señaló el padre.
Una de las realidades de la que no se pudo escapar y que la Iglesia no puede ignorar es que muchos jóvenes dejaron de ir a los templos después de que el virus causara tantos estragos. Hay estudios que señalan que el 40% de ellos se alejó.
“Cada oportunidad que se tiene de realizar actividades pensadas para ellos, tiene que ser con el ánimo de volver a conquistarlos, a fascinarlos, y tal como dice la Pastoral Juvenil Latinoamericana: hay que volver a fascinar”, enfatizó el sacerdote.
Novedades
El Encuentro trajo novedades, y la primera de ellas fue el lugar elegido: el gimnasio del colegio Papa Francisco, que cuenta con aire acondicionado.
La otra novedad fue que dentro de la plataforma digital se incluyó un subsidio para jóvenes. “Hemos elaborado un proyecto que se llama: ‘Y después del ENRJ, ¿qué?’ Los jóvenes podrán descargar, desde marzo hasta diciembre, temas para cada semana, dirigidos a aquellos grupos que se reúnen semanalmente y que puedan dar seguimiento a todo lo que vivieron durante el Encuentro”, explicó el padre De León.
Este material estuvo fundamentado en los temas de los predicadores, y los jóvenes tendrán, cada mes, actividades distintas para seguir en sintonía, dándoles formación. “Es un subsidio para ayudar a las parroquias, a los grupos juveniles y a los movimientos a seguir en comunión con el Encuentro Juvenil”, detalló el sacerdote.
Este año 2025, el lema elegido para la actividad juvenil fue: ‘Alégrense los que buscan al Señor’.
El legado seguirá vivo
“Yo soy párroco y estoy muy feliz en la parroquia donde estoy, pero todo este trabajo que realizo por el Encuentro Juvenil es mi manera de tributar a la memoria del padre Segundo Familiar Cano. Yo nací, viví y crecí con él, y hago todo esto por los jóvenes y, en los jóvenes, por él. Es la manera que tengo de seguir manteniendo vivo el legado de Segundo Familiar Cano”, dijo emocionado el párroco.
“A él no le gustaban los títulos ni los honores ni que se dijera que la gloria era de él. La gloria es para Dios y lo hacemos en ese ámbito”, añadió.
Trabajar por los jóvenes y entregarse por ellos es el mejor tributo que se le puede hacer a alguien que, precisamente, a sus muchos años vivía pensando en la juventud. Mientras el Encuentro Juvenil siga presente en medio de su realidad, la memoria del padre Segundo Familiar Cano también lo estará, recalcó el sacerdote.
