Redacción/ Fotos: Cortesía Mi Ambiente
Las estufas ecológicas son una opción, al redundar en beneficios en las familias donde se han instalado, al ser mucho más eficientes.
Los fogones tradicionales de tres piedras, que tantos recuerdos nos traen de nuestra campiña tienen peligros latentes, al peligrar la salud de los usuarios, como lo son las enfermedades pulmonares obstructivas. En la parte ecológica, causan daños en el ambiente, porque generan mucho humo y consumen mucha leña, la cual es tomada de los árboles aledaños a las viviendas, fomentando la tala que desencadena en deforestación.
En cambio, la estufa ecológica, se basa en el funcionamiento de un quemador en forma de codo, el cual se construye con cuatro baldosas de barro horneado; en total se usan cinco piezas de 30 cm x 30 cm cortadas a la medida, en la que se introduce la leña y al estar encendido, dirige la llama o calor hacia la parte superior del codo y hace contacto con las hornillas de hierro confeccionadas para sostener las pailas o recipientes.
“Las estufas ecológicas se caracterizan por la reducción en el uso de leña hasta en un 70 %, registran menos tiempo de cocción de los alimentos sin desmejorar la calidad y cuidado del medio ambiente”, explicó Yoira Pittí, jefa de la Sección de Cultura Ambiental, perteneciente al Ministerio de Ambiente (MiAmbiente) en Chiriquí.
Entre las ventajas que ofrece está la reducción de la contaminación atmosférica, lo que disminuye el calentamiento global; la radiación del calor es nula porque el sistema utilizado actúa como aislante, haciendo que quien cocine esté protegido del calor y de posibles quemaduras. Además, mantiene la comida caliente por más tiempo.
En cuanto a la salud disminuye los problemas respiratorios de toda la familia.
“Antes en el fogón de leña me quemaba mucho las manos y brazos, se consumía más leña; pero, ahora con esta estufa no utilizo mucha, se cocina más rápido. He cocinado sopas, frijoles y arroz”, aseguró Catalina Bejerano Reyes, quien obtuvo una estufa ecológica, al formar parte del Plan Colmena que impulsa el Gobierno Nacional.
Bejarano, al igual que un grupo de damas voluntarias que recibieron este beneficio, es residente del sector de Almendro en la comarca Ngäbe – Buglé.
La joven madre, Yadira Hernández, también manifestó su beneplácito al manifestar que “estos fogones son ahorradores de leña y no se genera mucho humo, ni hollín en sus casas”.
La dotación de las estufas coincidió con la celebración del Día Internacional de los Pueblos Indígenas, por lo que las damas beneficiarias, pertenecientes a la etnia Ngäbe – Buglé celebraron ambos propósitos, ellas a su vez son voluntarias ambientales de MiAMBIENTE.
Alto consumo
En estos pueblos se utilizan para cocinar árboles de variadas especies como: nance, naranjo, macano, corpachi y canillo leñoso.
Entre los cambios comprobados al integrar en sus casas la estufa ecológica, está el menor consumo de leña, donde anteriormente por hogar se llenaban en su totalidad tres pickup con leña por mes. Un pickup tiene capacidad de 3.60 metros cúbicos (m³) de leña, es decir que al cocinar en un fogón tradicional se consumen por mes 10.8 m³, lo que equivale a aproximadamente tres árboles. Con la estufa ecológica solo necesitan llenar un pick up.
El proyecto se logra gracias al trabajo de los técnicos de Cultura Ambiental de MiAMBIENTE y el apoyo de los Voluntarios del Cuerpo de Paz del Gobierno de los Estados Unidos, quienes han construido hasta la fecha, 154 estufas ecológicas en 26 comunidades de Chiriquí, con las cuales se ha beneficiado directamente 772 personas.
Detalles
· En Panamá se ha trabajado en la construcción de estufas más eficientes, especialmente para que disminuyan del consumo de leña y así bajar la contaminación.
· Para este propósito, en las últimas décadas, se han desarrollado y utilizado diversos tipos de cocinas sobre todo en el interior del país y las comarcas.
· Entre estos modelos se encuentra: estufa Lorena y Chula, en la década de 1980, y recientemente las estufas tipo Torre, Fogones Felices y Estufa Ecológica.
