Estefany Rodríguez
Estamos en momentos en los que no sabemos ni que creer, por todos lados vemos personas que dicen que no hay que ser religioso ni creer en Dios porque nos manipulan. Pero ¿qué es ser religioso? Empezando porque nos definimos por religiosos porque creemos y seguimos una serie de tradiciones que nos ayudan a acercarnos a Dios, pero cuando este no es el fin, ¿tiene sentido la vía? Tenemos el compromiso de ser jóvenes que aman y conocen su fe, es muy fácil dejarnos llevar por un mundo que nos invita constantemente a hacer lo que nos antoja, sin reglas, sin nada que nos lo impida.
¿Te imaginas las calles sin semáforos que protejan a los carros de chocarse entre sí? Es curioso que muchos buscan la paz con yoga, santeros, brujos, entre otras cosas. ¿Sabes por qué? Porque muchas veces solo queremos un Dios a nuestra medida, que nos ame tal y como somos y no nos pida nada a cambio. SÍ… Dios te ama tal y como eres, pero justo porque no te quiere ver sufrir es que nos pide confiar en Él, tomar riesgos y sacrificar cosas por amor, como cuando tienes una relación, no le eres fiel porque te obligue, sino porque lo amas, entonces ¿Cómo cultivar una relación con alguien que no conoces y con el que no hablas?
La primera parte de esta receta mágica es aceptarte y conocerte, enfrentar tus miedos, escribirte una carta con tu vida y las cosas que te han hecho bien y mal.
Cuando sepas por dónde empezar entonces hablarle a Dios en la verdad, a veces pretendemos ser perfectos, no pedirle a Dios nada o no hablarle con sinceridad y adivina. ¡Dios ya lo sabe! Ya conoces tus pecados, tus tentaciones, lo que te hace sufrir y lo que te hace feliz.
La segunda parte nos invita a entregarle a Dios esas cosas y hablarle con sinceridad para que luego, tengamos un final feliz, pero en el cielo. Es imposible no tener sufrimientos o dolores en la tierra, pero todo resulta en como tomamos esos sufrimientos ¿Como afrontamos nuestra cruz?
Como tercera parte te puedo invitar a conocer la vida de los santos o algún personaje de la biblia que te guste ¡Busca ayuda celestial! Está disponible y esperando que la pidas.
No estás solo y no tienes que sufrir tu cruz solo, esta vida es para ser felices aún en nuestras dificultades y tristezas, pero debemos trabajar para que suceda. Tienes padres, hermanos, familia en el cielo cuidando por ti.