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Lugar de peregrinaje y oración muestra avances

Lugar de peregrinaje y oración muestra avances

La réplica de la Capelinha de las Apariciones de la Virgen de Fátima en Panamá nace como un fruto pastoral de la Jornada Mundial de la Juventud.

 

Por Karla Díaz 

La Capelinha es una pequeña capilla, un lugar de peregrinación, que estará ubicada en Clayton, en un terreno aledaño a la Conferencia Episcopal Panameña. La réplica de la Capelinha de las Apariciones de la Virgen de Fátima ya tiene un avance de casi un 50 % de la primera fase que contempla la estructura en sí, un pórtico y su techo con cobertor para la protección del mismo.

Todo esto gracias al aporte y las donaciones de los fieles que han creído en este importante proyecto, que sin duda será un medio de evangelización para visitantes y extranjeros.

“Es la misma feligresía la que ha hecho posible con sus donaciones los trabajos que podemos ver adelantados por el momento. Sin embargo, todavía se hace necesario el apoyo de los panameños para seguir avanzando hasta finalizar la obra”, dijo el Dr. Tomás Vásquez, presidente del Apostolado Mundial de Fátima.

 

¿De qué se trata?

La Capelinha es el corazón del santuario de Fátima, pues se trata del lugar donde la Virgen habló a los tres pastorcitos, Jacinta, Francisco y Lucía, aquel 13 de mayo de 1917. De las seis apariciones de la Virgen María, cinco sucedieron en ese lugar; y la estructura original en Fátima cumplió cien años en 2019, justo cuando en Panamá vivimos la Jornada Mundial de la Juventud.

La réplica de la Capelinha de las Apariciones de la Virgen de Fátima en Panamá nace como un fruto pastoral de esta Jornada. De hecho, fue esta la primera JMJ en la que se presentó la imagen original de esta virgen, ya que se trató de una jornada mariana.

 

El Santuario de Fátima concede esta autorización como señal de comunión con la Arquidiócesis.

 

¿Qué representa la obra?

Esta obra en Panamá representa la única  réplica de la región para Centroamérica y parte de Latinoamérica. Además es la quinta en todo el mundo, pues hay  una en República Checa, Filipinas, Puerto Rico y Brasil.

“Es una gran bendición de la Virgen hacia nosotros, y verdadera  importancia está en que los que podamos peregrinar a esta réplica ganaremos las mismas bendiciones, indulgencias y gracias como si estuviéramos  asistiendo a la capelinha original”, señaló Vásquez.

Monseñor Ulloa al pendiente de cómo va la obra.

 

Lo que hace falta

El presidente del Apostolado Mundial de Fátima recalcó que aún queda mucho por hacer.  “Tenemos que construir los senderos de la entrada, una cerca de seguridad y adecuar toda el área que es muy ecológica; vamos a mantener el ambiente lleno de hermosos jardines para la meditación, e  incluiremos el Camino de los Pastorcitos, se podrá hacer el Vía crucis, el rezo del Santo Rosario, todo acoplado con la naturaleza que este terreno nos brinda. La idea es adaptarnos con la naturaleza para meditar el plan de evangelización que tiene la Madre a través del mensaje de Fátima en cada uno de nosotros y tener un encuentro personal con Cristo”.

 

¿Cómo se logró que Panamá tuviera una réplica?

Para construir una réplica de la Capelinha, la diócesis primero debió tener autorización expresa de la Rectoría del Santuario de Fátima y su Consejo de Coordinación, requisito que le fue concedido a Panamá en 2019, luego de solicitud realizada por el arzobispo José Domingo Ulloa Mendieta.

Lo primero que se hizo fue la  solicitud al Santuario de Fátima para tener una réplica de la Capelinha de  las apariciones, la cual fue positiva de parte del rector del santuario. En la Capelinha se representa  el  Inmaculado Corazón de María del cual se proyecta la luz de Cristo, su hijo que ilumina la humanidad.

El Santuario de Fátima concede esta autorización como señal de comunión con la Arquidiócesis y con toda la nación de Panamá deseando que, a través de la construcción de la réplica de la Capelinha, se anime a la devoción del rezo del Santo Rosario y la Práctica de los 5 Primeros Sábados en reparación por los pecados cometidos contra el Inmaculado Corazón de María.

Para todo lo que hace falta, los fieles pueden realizar sus donaciones a través de la cuenta de Ahorros del Banco General #04-49-99-872824-8, a nombre de Apostolado Mundial de Fátima.