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Eco: en cada voz, un regalo de Dios

Eco: en cada voz, un regalo de Dios

Un coro de cámara tiene pocos miembros, en este caso son nueve. Cada uno de ellos tiene una función importante, casi de solista. Cantan a capela, y agradecen poder utilizar la música para comunicarse con Dios, a través del instrumento que Él les regaló: su voz.

 

Por Elizabeth Muñoz de Lao

Una serie de conciertos de música sacra presentará el Coro de Cámara Eco, en el marco de la Cuaresma y Semana Santa, según dio a conocer Ingrid Rodríguez, integrante del grupo.

El coro, integrado por profesionales de la música afines al canto coral, fue creado por el tenor y pianista Ariel González; el barítono Héctor Lomba Smith, y la soprano Ingrid Rodríguez.

“Nuestra intención es aportar algo diferente a la oferta que existe en Panamá. Queremos estar más presentes, y lo más importante: acercar la música a la comunidad al presentarnos en iglesias y sitios importantes para la cultura”, manifestó Ingrid Rodríguez.

 

La idea del grupo es darle opciones a la gente para que, a través de la música, pueda tener espacios de disfrute del arte, pero también de reflexión y de vivir momentos especiales”, señaló.

 

La agrupación se estableció cuando Héctor Lomba Smith y Rodríguez, ambos cantantes líricos (él es barítono), y Ariel González, pianista y esposo de Ingrid, junto con otros amigos músicos, fueron convocados en la parroquia Santa María La Antigua, donde se congrega la soprano, para realizar un concierto de música sacra.

En ese contexto, decidieron mostrar algo diferente y crear un programa de música vocal a capela, es decir, música para coro de cámara, con motivo de la Semana Santa del año pasado.

Al percatarse de que al público le satisfizo su presentación, se animaron e hicieron de Eco un proyecto permanente mediante el cual presentan obras que se hacen muy poco en Panamá, debido a que no es común este tipo de coros. Los hay, pero muy pocos de cámara.

 

Cada integrante cuenta

Un coro de cámara está formado por pocos miembros. En este caso son nueve voces, por lo que cada uno tiene un papel importante, casi de solista. El hecho de que no haya acompañamiento instrumental, permite que se exploren todas las posibilidades de la voz humana, sostuvo Ingrid.

 

Practican con mucha entrega para dar un espectáculo digno.

Los une la música

“Todos, de una u otra manera, hemos participado en la actividad de música coral en Panamá”, explicó la soprano.

Para el grupo, es un proyecto que va más allá de lo religioso; es cultural, y a todos los une la música. Ese es el caso de las sopranos: Ingrid Rodríguez, Sofía Méndez y Sin Ae Lee; de las contraltos: Lurys González y Deysi Atencio; de los tenores: Ariel González y José Rolando Cuevas; así como de los barítonos: Israel González y Héctor Lomba Smith.

Durante el año se han presentado en festivales, como el de grupos de cámara que organiza el Ministerio de Cultura y el de música sacra, realizado en la iglesia de Lourdes.

En principio se financian con aportes voluntarios de la gente que asiste a los conciertos.

Este año, cobrarán la entrada en algunos, pero también harán conciertos gratuitos, para que el dinero no sea una limitación para quienes deseen asistir.

 

Necesitan el apoyo del público para hacer el proyecto sostenible. con sus voces, acercan la música a las comunidades.

 

Presentaciones para este año

El coro, dirigido por Ariel González, presentará tres conciertos de música sacra: el primero se realizó el 12 de marzo en la parroquia Santa María La Antigua, a las 7:30 p.m.; el segundo en la Galería de Arte Juan Manuel Cedeño, del Ministerio de Cultura, el 22 de marzo, a las 7:00 p.m. (B/10.00), y el tercero, el 26 de marzo en la I. San Francisco de La Caleta, a las 7:00 p.m. (gratuito).

Una vez pasada la temporada de Semana Santa, presentarán, a mediados de año, un programa de música latinoamericana. Posteriormente, en noviembre, uno de música panameña, y en diciembre, un programa de música de Navidad.

“Vamos a hacer un recorrido musical a través de la música sacra, de cómo en diferentes momentos de la humanidad, el hombre ha utilizado la música para comunicarse con Dios a través de la voz, que es el instrumento que Él nos dio en nuestro propio cuerpo. Es una maravilla poder comunicarnos con Él de esa forma”, manifestó Ingrid Rodríguez.