La diócesis de Santiago se llenó de alegría al recibir a cientos de peregrinos de diversas nacionalidades para vivir una experiencia de fe en Cristo y compartirla con las familias anfitrionas de cada comunidad.
Desde el sábado 12 de enero llegaron delegaciones de diversas latitudes del mundo. La primera fue la de Colombia con un grupo de 24 peregrinos que fueron recibidos en la comunidad del Anon.
Seguido llegaron las delegaciones de República Dominicana recibidos por la comunidad de Martín Grande y el segundo grupo de peregrinos colombianos, recibidos en la comunidad de Cañacillas Arriba.
El pueblo Sonaeño se destacó al reunir a cientos de lugareños para recibir al primer grupo de peregrinos holandeses con calle de honor, bailes, tamboritos, fuegos artificiales y mucha alegría.
El lunes 14 de enero llegó la delegación de México con 170 jóvenes quienes fueron recibidos con una gran caravana desde Santiago Mall hasta la comunidad de La Colorada, donde Monseñor Plinio Mojica se vistió con su chamarra y sombrero mexicano para unirse a la fiesta.
Así, poco a poco se fueron sumando para vivir esta gran fiesta, y durante la prejornada, han hecho turismo interno, recorriendo las rutas turísticas religiosas como la del Padre Héctor Gallego en Santa Fe. También diversos sitios como la Yeguada, San Francisco de la Montaña, la ruta de Santiago que incluye la Escuela Normal, el Museo y la Catedral Santiago Apóstol.
Mientras se van sumando otras delegaciones, las que han llegado comparten con la comunidad, visitan el asilo de ancianos, juegan con niños de comunidades lejanas, convivios juveniles, eucaristías y sobre todo muetran ese interés por misionar y evangelizar con acciones.
El primer grupo de peregrinos holandeses compartió con la comunidad del Marañón y luego partieron hacia Cerro Plata donde visitaron un proyecto de finca autosostenible apoyado por la Embajada de Holanda.
Rafael Beltrán seminarista de la diócesis de Zipaquirá en Colombia señala que es su primera experiencia en una Jornada Mundial de la Juventud y que está muy contento con el recibimiento en Panamá, a pesar del viaje agotador y llegando de madrugada a Veraguas, las familias los han recibido con cariño, haciéndolos sentir como en casa.
Boomiki Foe Karmel Hermana de la congregación Servidoras del Señor y de la Virgen de Matará afirma que no había visto tanta alegría al llegar a un nuevo lugar, y muestra su gratitud por tan lindo gesto; además envía un mensaje a la juventud para que vivan en base a Jesús como pilar principal en esta Jornada que el papa Francisco ha convocado en Centroamérica.
