El envejecimiento de la población mundial es un reto conocido. Y a eso dedica un extenso análisis el Fondo Monetario Internacional, en un adelanto de los documentos de su cumbre semestral. Lo que llama la atención es la agresividad y crudeza con la que poco antes de la actual pandemia, los economistas del FMI planteaban que ante “el riesgo de que la gente viva más de lo esperado”, la edad de jubilación se debe ajustar a la esperanza de vida y el recorte de prestaciones y aumento de las cotizaciones.
El FMI ha planteado que las aseguradoras privadas cubran el riesgo de longevidad. ¿Y quiénes pueden pagar las altas primas de las aseguradoras privadas pasados los 65 años?
En medio de la actual pandemia, a finales de febrero 2020, el parlamento portugués adoptó en primera lectura cinco proyectos de ley a favor de la despenalización de la eutanasia que podrían ser aprobados definitivamente por los diputados de ese país en los meses venideros. Y en España, el Ejecutivo obtuvo luz verde en el Congreso de los Diputados para empezar a tramitar una ley prometida, hace dos años, reconociendo el derecho a la eutanasia en ciertas condiciones.
El Comité de Bioética de España ha anunciado que, por primera vez en su historia, emitirá un dictamen por cuenta propia, sobre un tema (en este caso, la eutanasia), sin que se lo haya pedido el Ejecutivo. Así lo han decidido por unanimidad sus 13 miembros. Entre ellos hay: 7 médicos, 2 científicos, 3 juristas y un profesor de Filosofía.
Importante
• Comités de Bioética. Se está preparando a toda velocidad una ley de eutanasia sin consultar con los que saben del tema. Es escalofriante que no haya “nada que obligue a los 23 miembros del Gobierno – todos ellos ignorantes en cuestiones médicas y sanitarias- a leer este dictamen.
• Eutanasia. Aplicar la ciencia a los cuidados paliativos para disminuir el sufrimiento de personas desahuciadas es humanismo, pero eutanasia es eliminar a personas por fines utilitarios, como bajar el gasto sanitario o matar a personas “descartadas” por la familia o la sociedad.
• ¿Reducir población para evitar el cambio climático? Christiana Figueres, secretaria ejecutiva de la Convención Marco de Naciones Unidas, sobre el Cambio Climático ha declarado que una de las maneras más efectivas de luchar contra el cambio climático es reduciendo la población mundial, ya que habría menor presión sobre los recursos.
Desafíos
- ¿Reducción de la población mundial?
La Agenda 21 plantea la “reestructuración de la población mundial”. Entre las estrategias de reducción poblacional directa que ya están en marcha: mantener las poblaciones vulnerables en la pobreza extrema, al límite de la sobrevivencia (por ejemplo, países africanos) de tal forma que niños mueren por desnutrición.
• Los descartables hoy
Liberar virus que causen epidemias y pandemias es una forma de despoblar la tierra. A esto se añade desde hace dos décadas, la promoción del descarte de los ancianos, los indigentes, limitándoles el acceso a la sanidad pública, reduciendo sus pensiones al límite de la sobrevivencia, y ahora, promoviendo el suicidio asistido.
• El control de la población
La humanidad no es una plaga, escribe el Papa Francisco en su encíclica Laudato Si’ acerca de los esfuerzos para combatir el cambio climático a través del control de población. Se pretende legitimar así el modelo distributivo actual, donde una minoría se cree con el derecho de consumir en una proporción que sería imposible generalizar, porque el planeta no podría ni siquiera contener los residuos de semejante consumo.