Cardenal Re implora al Espíritu Santo por un Papa fiel al Evangelio, la comunión y el amor.
Por Redacción
«Cada Papa sigue encarnando a Pedro y su misión y así representa a Cristo en la tierra; Él es la roca sobre la que se edifica la Iglesia. La elección del nuevo Papa no es una alternancia de personas, sino que siempre es el apóstol Pedro quien regresa.» Con estas palabras profundas y emotivas, el cardenal Giovanni Battista Re abrió la Misa Pro eligendo Romano Pontifice celebrada este 7 de mayo en la Basílica de San Pedro.
Esta liturgia marca el inicio espiritual del cónclave que elegirá al próximo sucesor de Pedro, un momento crucial no solo para la Iglesia Católica, sino para el mundo entero.
Una celebración con esperanza y responsabilidad
A sus 91 años y sin derecho a voto, el cardenal Re, decano del Colegio Cardenalicio, presidió esta última eucaristía antes del encierro en la Capilla Sixtina. Concelebraron 220 cardenales —electores y no electores— acompañados por obispos y fieles de diversas partes del mundo.
Durante su homilía, Re pidió la asistencia del Espíritu Santo para que sea elegido un Papa “que la Iglesia y la humanidad necesitan en este momento de la historia tan difícil y complejo”.
Los desafíos del nuevo Pontífice
El cardenal subrayó que el próximo Papa debe ser un pastor según el corazón de Dios, profundamente comprometido con el mandamiento nuevo del amor. Basándose en el Evangelio de Juan, afirmó que “el amor es la única fuerza capaz de cambiar el mundo”, y que la cualidad esencial de todo pastor es el amor llevado hasta el don total de sí.
Re también recordó que el Sucesor de Pedro debe promover la unidad de la Iglesia “no como uniformidad, sino como comunión profunda en la diversidad, siempre fiel al Evangelio”.
Un llamado a elegir con conciencia
Re hizo un llamado directo a los cardenales electores: elegir con “la máxima responsabilidad humana y eclesial”, dejando de lado intereses personales y priorizando el bien de la Iglesia y de la humanidad.
A las 16:30 horas, los cardenales ingresaron a la Capilla Sixtina, bajo el imponente fresco del Juicio Final de Miguel Ángel, para dar inicio al cónclave. Allí, el mundo espera con oración y esperanza el nombre del nuevo Papa, sabiendo que, como dijo el cardenal Re, “Pedro regresa”.
Santa Misa por la elección del Romano Pontífice
