Centro San Juan Pablo II: un nuevo lugar para la atención del prójimo

Centro San Juan Pablo II: un nuevo lugar para la atención del prójimo

El buen trabajo del Centro San Juan Pablo II se extiende, con la apertura de una nueva obra en Pan de Azúcar al rescate de los adictos y otras necesidades del área de este sector de San Miguelito.

Karla Díaz 

En alianza con la Parroquia Cristo Luz del Mundo, del área de  Pan de Azúcar, el Centro de Orientación San Juan Pablo II inaugurará una nueva oficina, en donde contarán con un equipo de psicólogos y especialistas que atenderán a las personas de la comunidad que así lo ameriten. 

En estos momentos se encuentran en la fase de adecuaciones y reparaciones del recinto, que está ubicado en un terreno que corresponde a la parroquia del lugar, para abrir sus puertas en el próximo mes de febrero. 

PRUEBAS. Los Centros también atienen situaciones de salud.

 Ariel López, Director del Centro San Juan Pablo II, mostró su alegría por poder lograr junto a su equipo de trabajo y las muchas donaciones recibidas del pueblo generoso, este sueño, un sexto centro, a 6 años de la apertura del primero que está ubicado en calle 32 Este, cerca al área de Calidonia.

“En este nuevo centro habrá un grupo de especialistas y psicólogos atendiendo las necesidades que se presenten en el área. No solo se consideran temas de adicción, sino todo tipo de apoyo que se necesite o que requiera cualquier persona, sin importar sexo, credo o situación en la que vivan”, detalló López. 

Agregó que para el buen funcionamiento de estos hogares, en los que se brinda alimentación y atención integral, siguen necesitando  las donaciones de ropa, zapatos, alimentos y  útiles de aseo personal, así como el tiempo de profesionales que quieran brindar sus servicios para las personas que los soliciten. 

Presentan informe a la Curia Metropolitana 

DIRECTOR. Ariel López rinde cuentas en un informe socio económico ante la Coordinación de la Pastoral Social-Cáritas de la Arquidiócesis.

El Centro San Juan Pablo II ha presentado a la Curia Metropolitana un informe socio económico de todos los impactos que tuvo durante el 2021; que deja en evidencia que han llegado a gran cantidad de personas, trabajadores sexuales y  población de jóvenes trans, así como privados de libertad y personas que han necesitado algún tipo de ayuda.

“Hemos visto números, cifras concretas, cantidades de bolsas de comidas y beneficios que han recibido las personas. De igual forma hemos detallado el apoyo que ha brindado el centro en el área de la salud, teniendo un gran impacto en la población, ya que muchas personas no cuentan con recursos, ni siquiera con información requerida para poder atenderse”, señaló Ariel López, director del centro. 

Los problemas los enfrentamos de manera creativa… las dificultades son oportunidades.

El informe detalla que se han realizado pruebas médicas, incluidas las de VIH con un total de 65, de las cuales 2 fueron positivas y 63 negativas. También se hicieron 26 pruebas de THC, arrojando 23 negativas y 3 positivas. Además, el centro efectuó durante este año, 22 pruebas COC, arrojando 3 positivas y 19 negativas, y  19 pruebas de embarazo. 

ALIMENTACIÓN. Miles de platos de comida son entregados a personas necesitadas.

Además, se brindó  atención a trabajadoras sexuales de distintas nacionalidades, entre estas: 46 panameñas, 80 colombianas, 2 de Brasil, 1 de Ecuador, 7 de Venezuela, y 2 de República Dominicana.

De igual forma se les dio el apoyo  a pacientes con cuadros de leucemia, y a personas que han requerido calzas dentales, frenillos, medicamentos, hospitalización, curaciones y primeros auxilios.

En cuanto a la alimentación a los habitantes de la calle se han brindado 43,800 platos de comida caliente. A trabajadores sexuales y trans  se les ha apoyado con 840 bolsas de comida. Los privados de libertad  contaron con 1,200 platos de comida servidos en la mesa, y la paila comunitaria ha favorecido a 5,200 niños. 

EL TRABAJO EN EL CENTRO HA DADO FRUTOS

MENAHEM. Un grupo de jóvenes en conflicto con la ley penal, acepta la orientación y el compartir.

La Comunidad Misionera Juvenil Menahem, que nace de la pastoral Universitaria de la Universidad de Panamá, ha tenido un fuerte acercamiento con el Centro San Juan Pablo II, quienes le hicieron la invitación para participar con los jóvenes del  Centro de Cumplimiento de Menores en unas catequesis previo  a la JMJ. 

Así, ya llevan 3 años de estar sirviendo en el trabajo con los jóvenes, tratando de fortalecer su vida de fe y brindan apoyo emocional que les abra puertas para iniciar un nuevo camino. Intercambian enseñanzas de crecimiento y formación enfocados en la fe, en su personalidad, la inteligencia emocional y dinámicas independientemente del credo que profesen.

Luis Hernández, asesor de la comunidad misionera, destaca que todos merecemos nuevas oportunidades, sobre todo porque detrás de un chico con una condición penal, hay un adulto que ha manipulado esa realidad, esa conducta.