En este mes dedicado a las Sagradas Escrituras, es placentero enviar un saludo de paz y armonía a todos los hermanos lectores de este medio.
Estamos haciendo grandes esfuerzos para que nuestros estudiantes tomen conciencia de lo importante que es la práctica del año verde. Nos sentimos orgullosos porque en todas las regiones educativas del país estamos trabajando en el cuidado de la creación. Uno de los colegios que podemos señalar es el Instituto José Dolores Moscote, al mismo tiempo que lo felicitamos por la realización de la feria ecológica, como fruto de la Pastoral Educativa y Estudiantil del Ministerio de Educación, bajo la asesoría del Capellán, Presbítero Jorge Rivera.
El Papa Francisco en su carta Laudato Si, invita no solo a los creyentes, sino también a los no creyentes, a cuidar la casa de todos; porque si los creyentes necesitamos oxígeno puro y agua, los no creyentes también.
Pertenecemos todos a la misma casa que no os abriga y refugia. “Dijo Dios: «Hoy les entrego para que se alimenten toda clase de plantas con semillas que hay sobre la tierra, y toda clase de árboles frutales. A los animales salvajes, a las aves del cielo y a todos los seres vivientes que se mueven sobre la tierra, les doy pasto verde para que coman.» Y así fue” (Génesis 1,29-30).
Cuando el Señor Dios Altísimo finalizó la creación, exclamó: todo es bueno y la entregó en nuestras manos. ¿Cuido o destruyo esa creación? Es por ello, que levanto mi voz:
No a la tala de los árboles.
No a tirar la basura en los pasillos, en el piso, en la calle, en los ríos, en los mares
No botar la comida.
- Sembrar un árbol o una planta
- Evitar aerosol
- Recoger en la casa todos los envases plásticos y latas para llevarlos a los recolectores más cercanos.
- Confeccionar bolsas de telas y hacer exposición en las escuelas.
- Hacer proyectos para cuidar el ambiente.
¡Comienza ya. Es urgente! Qué bueno que ya no entregan bolsas plásticas en los supermercados. En algo vamos avanzando.
