«Actúa como si todo dependiera de ti, sabiendo muy bien que en realidad todo depende de Dios», tomando esta frase de san Ignacio de Loyola, el padre Alexandre Awi Mello, secretario del Dicasterio para los Laicos, la Familia y la Vida inyectó una buena dosis de ánimo y esperanza a los voluntarios del Comité Ejecutivo de la JMJ. En comunión celebraron la eucaristía celebrada en la parroquia Santa María La Antigua de Bethania.
Con el apoyo del sacristán, consiguió un martillo y un clavo para explicar en su homilía la actitud instrumental con la que se debe vivir esta Jornada. “El que agarra el martillo es Dios y nosotros somos las herramientas, así que estemos tranquilos porque esta obra es de el Señor y saldrá a su manera, no a lo nuestra”, manifestó.
El padre observó en esta visita a un equipo de voluntarios activos trabajando de manera muy profesional. “Lo que humanamente se puede hacer, ustedes lo están haciendo, no se desesperen ” aseguró.
Aclaró que cada uno es libre de responder sí o no, cuando el Señor nos pregunta:
¿quieres martillar?. El por ser Dios, podría hacer esta y otras obras solo, pero no quiere y por eso nos llama. “Dos años de esfuerzos y sacrificios, horas de dedicación, de sueño, bien ustedes pudieran decir no quiero más. En este mes que queda ocúpense sin preocuparse” dijo el sacerdote.
Exhortó a los fieles presentes a tomar a María como ejemplo de una espera activa, nadie como ella estuvo preparándose para la llegada del Señor. “Ustedes, preparan desde hace dos años el camino para la venida de Jesús, que llega a través del Papa Francisco y de los jóvenes del mundo”.