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Dominar un oficio es un gran comienzo para crecer

Dominar un oficio es un     gran comienzo para crecer

Vivimos en un mundo competitivo y muy exigente, con cambios constantes en el mercado laboral. Quizás, les causa tensión escuchar a sus padres decir que cada vez la situación económica está más dura, que ahora todo es más difícil.
Sin embargo, de algo pueden estar seguros, el secreto para enfrentar este tiempo que les tocó, es nunca dejar de capacitarse, siempre tener inquietudes por aprender algo diferente para aprovechar las oportunidades que se les presenten.
El profesor Montgomery Johnson, docente de la USMA afirma que el joven debe tener una formación integral, su educación debe ser polifacética. No solo en lo académico, sino fuertemente en lo humanista, en lo espiritual y científico.
También sucede que la mayoría de veces desviamos la atención de aquellas competencias básicas en el hogar. Ni en la escuela, ni en la universidad nos enseñan a cambiar bombillas, a destapar una cañería, o qué hacer si se rompió la pata de una silla. ¿Por qué se recurre a otras personas y hasta se gasta en su pago para oficios tan sencillos como cambiar una llanta o tomar el ruedo de un pantalón?
Por lo tanto, el profesor Johnson destaca que esa formación integral, debe incluir competencias de utilidad familiar práctica.
Si logras aprender un oficio podrás desarrollar tú mismo las oportunidades de trabajo y por ende generarás un ingreso que te permita solventar tus gastos y tener también la posibilidad de crear tu propio emprendimiento.
Saber un oficio es un gran comienzo para asegurar un ingreso constante, que permita ir creciendo para poder realizar la actividad que más te guste.
Quizás puedas pensar que la sociedad solo valora los graduados de las licenciaturas de carreras que a menudo están sobre saturadas. Sin embargo, el profesor Johnson aclara que en Panamá la demanda de profesionales idóneos en carreras técnicas e industriales es alta, muchos que ejercen estas profesiones son empíricos y olvidamos que estas mismas personas, en otras latitudes, obtienen ingresos iguales o superiores a los profesionales de licenciaturas.
Todas las profesiones, ejercidas con dignidad son buenas e importantes para construir una mejor sociedad. Algunos oficios, a medida que se perfeccionan, se convierten en profesiones por ejemplo: cocinero, costurera, plomero, mecánico, albañil, panadero, electricista o artesano, entre muchos otros.