Iglesia no olvida al padre Héctor Gallego

Iglesia no olvida al padre Héctor Gallego

Llegamos a un aniversario más del secuestro y desaparición del padre Héctor Gallego, desaparecido hace 49 años del hogar de una humilde familia campesina de Santa Fe de Veraguas. Dos a quienes la justicia de los hombres consideró culpables, fueron sentenciados y condenados, mientras un tercero sigue prófugo de la ley humana. 

Sin embargo, lo que la Iglesia desea saber, desde hace 49 años, aún se desconoce: la verdad completa de dicho acto. Ninguno de los que participaron en el secuestro, homicidio y desaparición del sacerdote colombiano se atrevieron a decirla. ¿Dónde está Héctor?

Tampoco se dan los nombres e identidades de otros que, ya sea en la ejecución material como en la complicidad, participaron en el hecho criminal. Sólo el recuerdo del padre Héctor y la valentía y fidelidad de los campesinos de Santa Fe ha estado presente cada 9 de junio, reclamando la verdad y los restos del sacerdote que les llevó la Buena Nueva de la liberación. Recuerdo y fidelidad que le da aliento a los que creen en el Reino, y atormenta a los malvados que se conjugaron para callar con la sombra de la muerte a aquel que con la Buena Nueva llenó de esperanza el corazón de lo campesinos oprimidos.

Al amparo de la noche, como a Jesús en el huerto, se lo llevaron los secuestradores, siguiendo las órdenes del poderoso. Maltratado, golpeado, amordazado, atado, y vejado, como hicieron con Cristo las autoridades de su tiempo. 

Hoy lo recordamos y seguimos clamando por la verdad para que se inicie el deseado proceso de canonización del padre Héctor Gallego. Pero, según la legislación de la Iglesia, es indispensable  confirmar la muerte (con pruebas o por el tiempo transcurrido) como prerrequisito para iniciar un proceso de canonización.