El venerable Arzobispo Fulton J. Sheen, fue un gran predicador y maestro; escritor prolífico y profundo. Uno de sus clásicos en matrimonios fue titulado: «Se necesitan tres para casarse»
¿Quiénes son estos tres? Es muy simple, ellos son el esposo, la esposa y tercero – y más importante – es Jesús, el pegamento que mantiene todos los matrimonios juntos.
Fulton ofrece unas cuantas sugerencias concretas para fomentar un Matrimonio Santo – entre el hombre y la mujer hasta que la muerte los separe.
Preparación al matrimonio
Los atletas se preparan antes de una competencia. Los futuros doctores invierten muchos años en la preparación de su misión de salvar vidas y sanar enfermos. ¿No deberían las futuras parejas invertir tiempo y esfuerzo en estudiar la naturaleza del matrimonio, de la familia, obstáculos en el camino con el fin de vivir su vocación?
Parejas matrimoniales mentoras que les dé consejos espirituales y prácticos de cómo vivir su matrimonio.
Las parejas deben aprender Planificación Natural Familiar- los medios naturales para evitar embarazos solo si tienen justa y suficiente razón así como el Santo Padre Pablo VI nos recuerda en su encíclica Humanae Vitae El retiro de parejas comprometidas: Si el retiro está bien organizado, entonces las parejas recibirán herramientas para vivir su matrimonio pacíficamente, en fidelidad y armoniosamente, con bendiciones abundantes para sus hijos.
