José María Correoso Catalán, sacerdote que inyectó humanismo al Acta de Independencia

José María Correoso Catalán, sacerdote que inyectó humanismo al Acta de Independencia

El presbítero José María Correoso Catalán participó activamente en la redacción del Acta de Independencia de Panamá de España, suscrita el 28 de noviembre de 1821. Los datos históricos conservados señalan que, en base al papel que jugó, el sacerdote ocupó una curul como diputado de la Cámara Provincial del Cantón de Los Santos en 1825.

 

Por Redacción

Por su nivel cultural e ideas libertarias adelantadas a su época, se considera que el sacerdote José María Correoso Catalán participó activamente en la redacción del Acta de Independencia de Panamá de España, suscrita el 28 de noviembre de 1821.

Poco se conoce sobre su papel específico en la gesta independentista. No obstante, lo que sí está claro es que participó entusiastamente en el movimiento que culminó con la declaración libertaria.

Un análisis de contenido del Acta de Independencia arroja que en sus 12 puntos hay una alta dosis de academicismo, humanismo, e ideas libertarias modernas, que historiadores atribuyen a la personalidad de Correoso Catalán.

El Acta muestra, además, un profundo contenido democrático derivado de la Revolución Francesa y del pensamiento británico de la época. Estos ideales eran característicos de personas con formación intelectual, como el sacerdote.

 

Museo de la Nacionalidad (Antiguo Cabildo)

 

Sus orígenes

De acuerdo con el Diccionario de Historia Cultural de la Iglesia en América Latina, el apellido Correoso y el título de Doctor que se le acredita demuestran que pertenecía a una familia colonial de letrados, notarios y militares.

El Diccionario de Historia Cultural de la Iglesia en América Latina es una plataforma tecnológica que contiene abundante información sobre el aporte cultural histórico de la Iglesia Católica.

A Correoso Catalán se le atribuye ser la voz cantante en Los Santos y en las áreas aledañas de las ideas independentistas, ser uno de los ideólogos de la gesta y tocar las campanas de la iglesia de San Atanasio de La Villa de Los Santos, para alentar a la población cuando se proclamó la independencia.

Además, le tocó presidir la iglesia de San Anastasio, entre los años 1811 y 1823, en una época convulsionada que marcó la historia de Panamá, la región y el mundo.

 

Su mayor legado

El texto del Acta tiene un alto sentido humanista. El punto 3 deja en “absoluta libertad” a los soldados españoles de “tomar el partido que les convenga” y de regresar a su natal España, con transporte y honores incluidos, si así lo decidían.

El punto 4 dispone que los españoles enfermos que estaban en el hospital, en ese momento, recibirían atención médica por parte del nuevo gobierno y una vez restablecida su salud, podrían decidir el rumbo que tomarían.

En el pronunciamiento se dejó claro, además, que las instituciones oficiales existentes serían respetadas y se tomarían todas las previsiones para mantener la tranquilidad y las finanzas públicas.

La dignidad de los soldados españoles se respetó y los que así lo decidieron, entregaron las guarniciones, con la solemnidad militar requerida.

Y finalmente, se ordena tomar todas las previsiones del caso para que el naciente gobierno funcionara con la institucionalidad requerida. Estas ideas de vanguardia y de “defensa vehemente de los derechos humanos”, como las define el Diccionario de Historia Cultural de la Iglesia en América Latina, son atribuidas, en gran medida, al pensamiento del sacerdote Dr. José María Correoso Catalán.

El título de Doctor que se le atribuye está relacionado con el Derecho Canónico y Civil, por lo que la redacción del Acta, según el diccionario, muestra claramente profundos conceptos jurídicos, que no eran muy frecuentes en un lugar como La Villa de Los Santos de aquella época.

Los datos históricos conservados señalan que, en base al papel que jugó, el sacerdote ocupó una curul como diputado de la Cámara Provincial del Cantón de Los Santos en 1825.

 

La bandera santeña con los colores bolivarianos que tuvo su origen en 1821.

 

Un letrado independentista

Otros datos sueltos refuerzan la versión de que el doctor Correoso Catalán fue un ideólogo que redactaba y revisaba documentos que eran compartidos con otros dirigentes de la causa.

Sin embargo, su intervención revolucionaria no fue solo en el ámbito epistolar, también viajó de pueblo en el pueblo promoviendo la independencia por ser una persona de palabra fácil.

La tarea impuesta al sacerdote no era fácil ni libre de peligro. La historia registra que los ideólogos y mensajeros de la independencia exponían sus vidas con mucha frecuencia.

En los meses previos a la independencia, era notoria la violencia del ejército español hacia la población criolla, a la cual obligaba a pagar elevados tributos ordenados por la Corona Española y le arrebataba a sus jóvenes para reclutarlos como soldados.

Por su pensamiento profundo y moderno, el doctor Correoso Catalán fue incluido por el Diccionario de Historia Cultural de la Iglesia en América Latina como uno de los religiosos más sobresalientes en toda Latinoamérica.