Estefany Rodríguez
Nuestros celulares y los medios de comunicación virtuales, como las redes sociales, siempre habían sido considerados como artefactos que nos alejan de Dios. Pero ese mismo Dios, que hace nuevas todas las cosas, se encargó de cambiar los planes. Hoy, gracias a estas tecnologías, podemos celebrar la PASCUA DE RESURRECIÓN, más unidos que nunca con nuestras familias y con toda la Iglesia.
Jesús está en todos lados y principalmente en nuestros hogares. Ese mismo Dios nos está dando una oportunidad de oro, llegando por donde más nos gusta para acercarse a nosotros. Él quiere siempre ser parte de nuestra vida.
El Señor no se pelea con la innovación, más bien quiere ser parte de esta. Durante de estos días de cuarentena ¿quiénes de nosotros, hemos podido acercarnos al Padre, con su Palabra por medio de las redes sociales? ¿Quiénes han podido conectarse con sus familiares y amigos por medio de Skype y Zoom?
Es impresionante ver la cantidad de sacerdotes que hacen parte de la innovación, llegando a sus fieles en estos momentos de incertidumbre mundial por medio de ¡Eucaristías en Instagram! ¿Quién lo hubiera pensado?
Jesús nos ha llevado al desierto y nos está invitando a enamorarnos de Él (Oseas 2:14). Ahora, tenemos todo el tiempo para este enamoramiento o quizás reconciliación con ese Dios misericordioso que no mira nuestro pecado, ni las fallas que hayamos cometido sino mas bien, nos mira con amor y misericordia.
¿Estás listo para aceptar estos dones?
