Malanga: opción alimenticia para el cuidado del corazón

Malanga: opción alimenticia para el cuidado del corazón

Al controlar la presión arterial beneficia de manera general al sistema cardiovascular.

Diamar Díaz Nieto

Deliciosa y natural, la malanga es una opción dentro de los tubérculos saludables y con bajo costo, que se puede conseguir en los diferentes mercados de Panamá.

El magíster en nutrición, José Ramiro López, explicó que la malanga es un tubérculo comestible nativo de las regiones tropicales, de la misma familia del otoe, y que gracias a su parecido es conocido por muchos como ‘otoe blanco’.

López es nutricionista de atención primaria de la Caja del Seguro Social y labora en la Policlínica «Dr. Carlos N. Brin», explicó que la malanga, por sus propiedades, cuida el corazón debido a la cantidad importante de potasio que contiene, por un lado y por otro, gracias a su bajo aporte de sodio.

Resaltó que el potasio no sólo ayuda la transferencia saludable entre las membranas y los tejidos del cuerpo, sino que también favorece el alivio del estrés y la presión arterial.

Tubérculo maravilloso
  • Como la malanga es baja en sodio, protege nuestro corazón del desarrollo de posibles enfermedades y regula los niveles de colesterol.
  • La fibra que posee este tubérculo, lo posicionan como un alimento bueno como diurético, también como facilitador de la digestión y mejora el tránsito intestinal. 
  • Gracias a sus diferentes vitaminas, algunos de los beneficios de la malanga es que es antioxidante y además es buena para la piel.

“Al facilitar la disminución o control de la presión arterial beneficia de manera general al sistema cardiovascular”, afirmó.

Basándose en la evidencia científica, el especialista informó que un estudio titulado “Análisis de Nutrientes de la Raíz de la Malanga (Colocasia esculenta Schott) en el Trópico Seco de Colombia”, realizado por Amparo L. y colaboradores, publicado en la Biblioteca Científica Electrónica Scielo, en agosto de 2019, comparó el contenido de nutrientes de la malanga con el  camote, papa, yuca y ñame.

Indicó que dentro de este análisis se encontró entre los tubérculos observados, un contenido importante de fibra, hierro, calcio, magnesio, zinc, vitamina C, B1 y B3; no obstante, la  malanga además de poseer estos minerales y vitaminas, los superó en el contenido de proteínas.

Además, señaló que es una buena opción para acrecentar la variedad en el menú, en reemplazo del arroz, pastas, papas, pan, cereales, yuca, ñame, otoe morado y ñampí.

Expuso como ejemplo, algunas formas de cocción que le resultarán deliciosas, como podría ser salcochadas solas o al mojo, fritas (pero con freidora de aire); en puré o en sopa.

Siga las guías alimentarias

VARIEDAD. Es una buena opción para acrecentar la variedad en el menú, en reemplazo del arroz, pastas, papas, pan, cereales, yuca, ñame, otoe morado y ñampí.

El magíster López puntualizó la importancia de resaltar esos alimentos que nos ayudan a cuidar la salud y mejorar la calidad de vida.

Reiteró una serie de medidas para mantener una buena salud cardiovascular, aparte de consumir alimentos con alto contenido de fibra dietética y potasio, bajo en sodio y grasas saturadas; también es necesario moderar el consumo de sal y eliminar el uso de condimentos artificiales, ya que su contenido de sodio puede ser mayor al de la sal.

En su lugar, recomendó usar condimentos naturales, tales como: ajo, cebolla, culantro, orégano, ajíes o pimentones y tomates, entre otros.

También instó en el caso de malanga, incluir esta opción considerando siempre las guías alimentarias para Panamá, que consiste en un modelo de un plato de 9 pulgadas dividido en 4 partes. En ¼ colocar la malanga, ¼ la fuente de proteína (carnes o huevo), en el otro ¼ la porción de frutas y en el último ¼ la ensalada de vegetales.