El Primer Encuentro Nacional de Mujeres Católicas Afropanameñas reunió a más de 50 participantes, quienes destacaron las valiosas contribuciones realizadas, desde sus perspectivas étnicas, culturales, espirituales y ancestrales.
Por Marianne Colmenárez
Cada vez, las mujeres afropanameñas estamos más conscientes de cuáles son nuestros derechos, pero también cuáles son los objetivos y retos que tenemos en esta sociedad que tanto nos necesita. Unidas valoramos las prácticas de liderazgo basadas en la sororidad y el bien común”, afirma Jembell Chifundo, una de las expositoras que estuvieron presentes en el Primer Encuentro Nacional de Mujeres Católicas Afropanameñas, celebrado los días 29 y 30 de junio.
Durante la actividad, más de 50 mujeres de Colón, Chiriquí, Coclé, Panamá y Darién compartieron experiencias y conocimientos teóricos sobre el feminismo católico negro a través de la participación de expertas, quienes profundizaron sobre las distintas situaciones de exclusión, discriminación y racismo.
“Lo que pretendíamos con este espacio es que las mujeres negras panameñas, puedan impregnar con lo aquí compartido a otras mujeres en sus comunidades; necesitamos avanzar, porque cuando se empodera a una mujer, se empodera a toda una comunidad”, manifiesta Eunice Meneses, miembro de la Pastoral Afropanameña.
Por su parte, el sacerdote José Brutúa, secretario ejecutivo de la Pastoral, manifestó que la creación de esta red es un proceso que se está acompañando desde la Iglesia, porque se reconoce el papel importante que tiene la mujer y en este caso, la mujer afropanameña.
Encuentro continental
Con este encuentro nacional, Panamá avanza como primicia de lo que será una Red de Lideresas Afrodescendientes Católicas de las Américas. Esta vez participarán en modalidad virtual los días 16, 17 y 18 de julio.
En este evento continental reflexionarán sobre la situación de la mujer afrodescendiente en sus diversas identidades, como católica, consagrada, lideresa, entre otros roles que ejerce en la iglesia y la sociedad.
Apertura en las parroquias
Emilia Fuentes, secretaria de la Pastoral Afropanameña, señala que actualmente en la arquidiócesis de Panamá solo diez parroquias tienen su pastoral afro conformada, a pesar de existir desde hace 30 años.
“No responsabilizamos a los párrocos, pero dependemos de quien dirige la parroquia; nosotros continuamos formándonos haciendo un trabajo de visibilización para que nos reconozcan. Necesitamos apertura como las otras pastorales, seguimos trabajando para llegar con nuestra documentación y explicar por qué esta pastoral existe, cuáles son nuestros objetivos”, expresa.
Ligia Philips, ecónoma de la Pastoral Afro y laica comprometida de la parroquia San Juan Apóstol en Brisas del Golf, comparte que alrededor de 20 personas de su comunidad forman parte de esta pastoral.
“A los jóvenes, no solo les enseñamos a tocar los tambores, también adquieren conocimientos sobre su historia, saben de dónde vienen y aprenden a defender con educación y respeto en cualquier espacio su identidad”, recalca Philips.
Agrega que este espacio les ha servido para identificar los retos que tienen en las parroquias y en otras comunidades de fe.
