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Sin resistencia, acepta ayuda y consuelo en tiempos de duelo

Sin resistencia, acepta ayuda y consuelo en tiempos de duelo

Enfrentarse a la pérdida de quien fue compañero de vida, confidente o apoyo incondicional, es un desafío abrumador que muchas familias deben afrontar en algún momento de sus vidas.

 

Por Marianne Colmenárez

Después de 32 años de matrimonio, Marcela Márquez se vio enfrentada a la noticia de que en muy poco tiempo su esposo, José Bolívar Santos, partiría para siempre. “Boli” como le decía a su fiel compañero de vida, fue diagnosticado con un cáncer agresivo que lo arrebató de este mundo, casi que al mes de saber ese fatídico resultado médico.

Han pasado exactamente ocho meses, desde que Marcela junto a sus hijas, tuvo que dejar de ver al héroe de la casa. 

Afirmó que José era ese esposo y papá protector, confidente, con el que compartía no solo las responsabilidades del hogar, también misiones y compromisos de la Iglesia; juntos servían en la parroquia Santa Cruz de Chilibre y en la capilla Nuestra Señora de Fátima, ubicada en Los Pinos.

José Bolívar y Marcela construyeron una hermosa familia, 2 hijas y 3 nietas.

Bolívar fue catequista, era como un papá para los jóvenes de confirmación, siempre los animaba a luchar por sus metas.

Desde su muerte, Marcela ha experimentado una variedad de emociones como parte de su trabajo de duelo.

“He sentido miedo, tristeza profunda, rabia, desorientación sobre mi futuro y el de mi hija menor, quien todavía dependía al 100% de nosotros”.

Reconoció que al principio no quería aceptar algún tipo de ayuda, pensaba que el tiempo la curaría. Sin embargo, gracias a su familia, amigos de la iglesia, compañeros de trabajo y a su director espiritual, el sacerdote Conrado Sanjur, ha podido superar muchos momentos de dolor e incertidumbre.

 

Ser comprensivo contigo mismo puede marcar una gran diferencia en tu recuperación y bienestar emocional.

 

“Acepté que sola no puedo, por ello busqué también atención psicológica, con quien he podido atender mi dolor, mis emociones y nuevos retos. He tenido citas particulares y con la familia”, expresó.

 Marcela reconoce que la ayuda de la psicóloga es valiosa, pero confía en que aferrarse a Dios a través de la oración y de la eucaristía acelerará la sanación de sus heridas. “Al principio no podía ir a misa, todo me lo recordaba”, destacó.

 

Encuentre un sistema de apoyo

Mariangélica Lasso, laica comprometida de la Parroquia St. Mary´s de Balboa.

La acción más compasiva que pueden tomar mientras viven un duelo, es encontrar un sistema de apoyo de amigos y familiares afectuosos que le brinden la comprensión que necesita.

Mariangélica Lasso, tanatóloga y agente de la Pastoral de la Salud de la parroquia St. Mary´s de Balboa, recomienda hacer contacto con un grupo de apoyo que le acompañen en este proceso.

“Cuando se trabaja en colectivo un duelo familiar, es importante reconocer que el fallecido no representa lo mismo para cada integrante de la familia. Para uno fue el papá, para otro el hermano. No todos tenían la misma relación, que podía haber vivido la esposa, por ejemplo”, dijo.  

Explicó que cada individuo cuenta con recursos internos que pueden ser aprovechados durante este proceso. “Es fundamental abordar el duelo en sus diferentes etapas; si una persona no lo trabaja, puede terminar desarrollando reacciones automáticas debido al duelo no resuelto”, señaló Mariangélica .

Averigüe si hay un grupo de apoyo en su área al que le gustaría asistir. En esta parroquia, ubicada en Balboa, realizan una reunión presencial una vez al mes, generalmente el cuarto martes de cada mes de 7:00 p.m. a 8:15 p.m.

Para contactarles pueden enviar un mensaje al Instagram de la parroquia: @stmarybalboa o al WhatsApp: 6614-9870.