Durante la Cita Eucarística de este domingo que reunió a miles de feligreses en la Arena Teófilo Panamá Al Brown, el Obispo de Colón y Kuna Yala, Mons. Manuel Ochogavía, recordó a los fieles que la Iglesia tiene una opción preferencial por los más pobres.
Por Marianne Colmenárez
“La iglesia de Colón no puede ser más que una iglesia que opte por los que están en situación de pobreza, somos una iglesia de pobres que tienen fe”, afirmó monseñor Manuel Ochogavía en la tradicional Cita Eucarística celebrada este domingo 27 de agosto en la diócesis de Colón y Kuna Yala.
Desde la Arena Teófilo Panamá Al Brown, acompañado por el clero, laicos y diversas agrupaciones católicas, el obispo Ochogavía expresó su admiración por este pueblo Santo de Dios caracterizado por su alegría, solidaridad y capacidad de resiliencia, lo que les ha permitido seguir en pie de lucha a pesar del desprecio y la exclusión.
En su homilía denunció varios hechos de injusticia e indiferencia que afectan el país.
Aseguró que, “nadie se preocupa de la seguridad jurídica de los campesinos de Costa Abajo, que pelean por tener derecho a lo que históricamente ha sido de ellos, su tierra. ¿Dónde esta la justicia en este país para los más pobres?, estamos a punto de firmar un nuevo Tratado Hay-Bunau Varilla” afirmó el obispo.
Destacó la situación que se vive alrededor de la mina de cobre en Coclesito. “Basta con mirar las decisiones que se toman, ponen de primero el dinero y el poder; esto nos revela la clase de país que tenemos y que estamos permitiendo que se construya”.
Dijo además, que el pueblo no es consultado y se irrespeta el derecho que tienen los campesinos de vivir cultivando sus tierras desde sus tradiciones. “No se valora la dignidad del hombre y el amor de la gente a su tierra”.
Denunció la falta de seguridad con la que viven jóvenes colonenses que quedan abandonados sin acceso a una educación. Según Monseñor, estos chicos son captados por la delincuencia y el crimen organizado; “mueren en nuestras calles víctimas del odio” expresó.
En ese contexto, recordó que el Santo Padre en la reciente Jornada Mundial de la Juventud exhortó a tener coraje, hoy más que nunca. “No se trata de ser violentos, sino que debemos tener la valentía de hacer respetar nuestros principios, nuestra dignidad que nos la ha dado Dios, aquel que te ha creó por amor”.
“Seguimos las promesas de Jesucristo”
En su reflexión, el prelado explicó a los fieles que todo bautizado debe distinguirse por la justicia, la verdad, el amor, el perdón y la paz. “Nos debe distinguir nuestras opciones y decisiones, los cristianos no seguimos ideologías, ni seguimos aquel que está regalando hojas de zinc o bolsas de comida, seguimos a Jesucristo, quien siempre cumple sus promesas”.
