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Una decisión pendiente: reabrir las escuelas

Una decisión pendiente: reabrir las escuelas

El Coronavirus en las escuelas: ¿qué tan peligroso es el COVID-19 para los niños y otras preguntas sobre el riesgo de contagio en la vuelta a las aulas?… veamos.

AGENCIAS DE PRENSA

Muchos padres, cuidadores y tutores deben tomar nuevas y difíciles decisiones sobre cómo su hijo volverá a la escuela, por ejemplo, al decidir entre el aprendizaje presencial y el aprendizaje virtual.

Es uno de los temas más debatidos a lo largo del mundo desde que la pandemia de COVID-19 dejó a miles millones de niños y adolescentes sin clases presenciales.

Pero la decisión de cómo y cuándo reabrir las escuelas y si enviar o no a los niños depende de numerosos factores a nivel nacional, así como de la realidad de cada núcleo familiar.

Es fundamental que las escuelas abran de la forma más segura y rápida posible para reanudar las clases presenciales. Dado que las escuelas cumplen una función importante en los logros educativos, la salud y el bienestar de los niños.

Al trabajar junto con funcionarios de salud, las escuelas también pueden desempeñar una función importante para desacelerar la propagación del COVID-19, a la vez que garantizan que los niños disfruten de un entorno de aprendizaje seguro y saludable.

COMPLEMENTO. Hay aspectos de la convivencia e intercambio entre estudiantes que se ha perdido por la pandemia.

¿Qué tan peligroso es el coronavirus para los niños?

Los niños, incluidos los muy pequeños, pueden desarrollar COVID-19″, dice la Escuela de Medicina de Harvard. Sin embargo, continúa, «muchos de ellos no presentan síntomas». «Aquellos que se enferman tienden a experimentar síntomas más leves, como fiebre baja, fatiga y tos. Algunos niños han tenido complicaciones graves, pero esto ha sido menos común», agrega.

¿Pueden los niños transmitir el coronavirus a los adultos?

Una revisión de estudios globales, publicada a finales de junio por la Escuela de Higiene y Medicina Tropical y el Colegio Universitario (UCL), ambos de Londres, descubrió que los niños tenían aproximadamente la mitad de las probabilidades de contraer COVID-19 que los adultos, lo que significa que es menos probable que lo transmitan.

¿Pueden las escuelas convertirse en focos de coronavirus?

Un estudio publicado por la revista científica The Lancet Child & Adolescent Health, sobre la reapertura de las escuelas en Australia, afirma que estas no fueron un foco importante de infección por coronavirus.

Los investigadores afirman: «Nuestros hallazgos proporcionan evidencia de que la transmisión de SARS-CoV-2 (nombre técnico del nuevo coronavirus), en entornos educativos puede mantenerse en un nivel bajo en el contexto de una respuesta eficaz a la epidemia».

Parámetros 
  • Medidas seguras. En otros países, tienen guías actualizadas sobre qué deben hacer las escuelas para reabrir y qué han de sopesar los padres al momento de decidir si enviar o no a sus hijos a clases.
  • Estrategias claves. Para reducir la propagación: el distanciamiento social, lavado de manos, uso de mascarillas, ventilación, limpieza y desinfección de superficies. Horarios escalonados, grupos pequeños de alumnos y los protocolos para cuando alguien se enferme.
  • Toma de decisiones. Se trata de una nueva fase dentro de la pandemia en la cual, antes o después, los gobiernos tendrán que avanzar y los padres deberán decidir aunque, no existan recetas universales e infalibles.

«En aquellos lugares donde las medidas de mitigación de la pandemia resulten en un fuerte control de la enfermedad, anticipamos que las escuelas pueden mantenerse abiertas de manera segura, para el beneficio educativo, social y económico de la comunidad, mientras nos adaptamos a vivir con COVID-19», agregan.

Por el contrario, una investigación publicada en la Revista de la Asociación Médica Estadounidense sugiere que los menores juegan un papel importante en la propagación de enfermedades respiratorias durante las pandemias.

«Los niños son, en general, importantes transmisores de epidemias virales como la influenza, porque pasan largos períodos cerca de otros niños en las escuelas y durante las actividades físicas», afirman los autores.

PRESIÓN. De muchas frentes diversos, las autoridades reciben pedidos insistentes para reabrir las escuelas.

Tras el cierre de escuelas en 50 estados de EE. UU., entre marzo y mayo 2020, en promedio hubo una caída en el número de casos del 62% y del 58% en defunciones, aseguran los investigadores, quienes aclaran que otras medidas complementarias contribuyeron a estos porcentajes.

Decidir enviar a su hijo a la escuela, nuevamente o no, puede ser difícil. Al sopesar las decisiones sobre la vuelta a la escuela de su hijo, es importante considerar su nivel de satisfacción con las medidas que su escuela está tomando para reducir la propagación del COVID-19. Algunas consideraciones podrían incluir los riesgos específicos para los miembros de su hogar si su hijo contrae la infección en la escuela.