La organización y esquematización de la Pastoral Juvenil rumbo a lo que será la próxima Asamblea Nacional, que se llevará a cabo en la Diócesis de Penonomé en septiembre próximo, adelanta en ColónKuna Yala una serie de procesos que fortalecerán los espacios en los que se prevé participen los jóvenes.
Procesos
Iniciaron con un antes, durante y después de la Jornada Mundial de la Juventud 2019. «Cada diócesis hace todos los esfuerzos para reorganizar la pastoral juvenil, revisar algunos procesos y la integración de los jóvenes en las diversas acciones pastorales de la Iglesia», explicó Monseñor Manuel Ochogavía Barahona.
Yithzak González, Secretario Ejecutivo de Pastoral Juvenil en la Conferencia Episcopal, expresó que, las pastorales juveniles mantienen evaluaciones concretas; en Colón por ejemplo se están revisando proyectos que permitirán que los jóvenes se posicionen de su espacio dentro de la vida comunitaria de la Iglesia.
Recientemente se presentó la Exhortación Apostólica Post-Sinodal, del Papa Francisco, dirigida a los jóvenes del mundo, a raíz del Sínodo de los Obispos celebrado en Octubre del 2018.
Al respecto, y tomándola de referencia, Yithzak destaca que es necesaria la lectura de la misma, sin embargo, a través de las comisiones diocesanas de pastoral juvenil se estarán generando unas guías de estudio para encuentros en las comunidades juveniles, para que todos los jóvenes puedan, leer, analizar y vivenciar lo que nos dice el Papa Francisco en su exhortación.
González señaló que, dos jóvenes le acompañarán al Foro Internacional de la Juventud a celebrarse en Roma, Italia, entre ellos Laritza Carrión, de la diócesis de Colón y Erick Sanjur de la diócesis de David, todos miembros activos de la pastoral juvenil en sus diócesis.
Retos de la Juventud colonense
Laritza Carrión’ Coordinadora Diocesana de la Pastoral Juvenil, destaca que los retos de la juventud dentro de la Iglesia, principalmente están enfocados en no dejar de intentar que pasen las cosas, ser valientes enfocarse siempre en lograr que las metas se cumplan, a pesar de las adversidades, pues los jóvenes tienen que ser parte de la vida de la Iglesia y la sociedad. «El papel de los jóvenes hoy también nos invita a ser parte de una sociedad de cambio que se preocupe tanto por cosas tan pequeñas como no tirar una lata a la calle, trabajar de la mano de los jóvenes e incluso de los niños, seguir luchando por el cuidado de la casa común, nada mejor que estar informados en todo, política, iglesia y sociedad», puntualizó.