No más maltrato hacia la mujer

No más maltrato hacia la mujer

¿Dónde vas vestida así, te ves gorda y fea?, No te busques una mala hora; te la pasas donde tu mamá, ya eres casada; El dinero lo trabajé yo; tienes que complacerme aunque vaya contra tu pudor. Estas palabras tienen algo en común, todas son muestras de violencia contra la mujer y muchas féminas alrededor del mundo las viven a diario.

Hoy 25 de noviembre se conmemora el Día de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, esta fecha se escogió en recuerdo del macabro asesinato el 25 de noviembre de 1960 de Patria, Minerva y María Teresa Mirabal quienes eran militantes opositoras a la dictadura que ejerció, por más de 30 años, Leónidas Trujillo en República Dominicana. Sus cuerpos fueron encontrados dentro de un jeep en un barranco. Las tres fueron asesinadas a golpes y colocadas en el vehículo para aparentar que sufrieron un accidente de tránsito.

La violencia contra la mujer, en especial la violencia doméstica está en aumento y de esta realidad Panamá no escapa.

Pero por qué hay hombres que cometen esos actos y se olvidan de amar y tratar bien a sus esposas como se enuncia en las Sagradas Escrituras específicamente en Colosenses 3:19, No seas cruel con tu esposa.

La Hermana de la Misericordia Angelina Mitre, quien es psicóloga del Centro de Orientación y Educación Familiar (COEFAM) explicó que existe un mito, y es que en los casos de maltrato o violencia hacia la mujer la pareja se excusa diciendo: yo lo hice porque me provocaste, y que esa justificación es falsa, porque quien lo hace es porque le falta dominio de su enojo, dominio de su frustración o del hecho de querer controlar a la otra persona, pues la violencia es un deseo de controlar a otro, por medio del miedo, de la humillación de quitarle la parteeconómica, meterle creencias que es una persona desvalida.

Mitre quien es magister en terapia de familia y pareja expresó que existen diferentes tipos de violencia doméstica que afectan a la mujer como lo son la violencia física, emocional/psicológica, patrimonial y sexual.

En la violencia psicológica hay insultos, humillaciones, burlas, des-calificaciones, aislamiento emocional, chantajes, gritos, control de lo que dice o hace, entre otras formas, detalló. En la violencia sexual, afirmó que entre sus manifestaciones está el abuso sexual, gestos o lenguaje grosero, obligación a gestos o caricias, imposición de la relación sexual no consentida. Agregó que es cualquier forma de contacto sexual no deseado, ya sea que ella esté casada, unida o separada.

 

Referente a violencia económica o patrimonial señaló que hay una limitación injustificada al acceso y manejo de bienes comunes; cuando el conviviente no proporciona dinero para los gastos del hogar o vende los bienes que pertenecen a la pareja para su beneficio.

En la violencia física hay entre otras cosas golpes, empujones, patadas, puñetazos, mordeduras, quemaduras, cortes, intentos de estrangulamiento o palizas.

Estas agresiones pueden desencadenar en el desenlace fatalde muerte que es tipificado como femicidio.

El abogado penalista y especialista en temas de familia, Orison Cogley explicó que desde 2013 existe en Panamá una Ley que establece el femicidio como una nueva conducta delictiva y que en otrora estaba solamente como un agravante del delito de homicidio.

Indicó que el artículo 132 A del Código Penal define como femicidio cuando una persona cause la muerte por motivaciones de género, es decir, por su condición de ser mujer.

Expuso que constituye como muerte por femicidio cuando es dentro de una relación de pareja, cuando existe una relación de confianza con la víctima, cuando haya características de ritos grupales o por venganza, la muerte se da frente al hogar, frente a los hijos y la víctima esté en condiciones de riesgo o de vulnerabilidad, entre otros casos.

Reconoció que hay estudios criminológicos que indican que este tipo de conductas va en avance donde la mujer es el punto frágil, al ser violentada con más saña e ímpetu, y que en el afán de protegerla es que se dan estas respuestas a través de las políticas legislativas del Estado con el establecimiento de nuevos delitos.

Informó que el feminicidio tiene un origen sociocultural e histórico, cuyo sustento ideológico se puede encontrar en el machismo.

Problema cultural

Los números no son más que un registro frío de una cultura social. Sociólogos asocian la violencia doméstica a un tema cultural que viene de nuestros antepasados y que aún está muy arraigado en nuestra sociedad. Este flagelo está vinculado a la postura dominante del hombre sobre la mujer.

La fiscal de Familia del Ministerio Público, Cádiz Gutiérrez de Canto puntualizó que la violencia doméstica va en aumento y recalca en factores que quizás algunos pasan por desapercibidos porque inhiben los umbrales de la inhibición, y es cuando se ingieren muchas bebidas alcohólicas y después viene el descontrol que produce agresiones y alteraciones.

Igualmente sucede con el consumo de drogas, cuando de jóvenes inician en su empleo y al convertirse en personas adultas y formar su hogar inciden en violencia dentro de su familia.

Instó a quienes sean víctimas de este delito a que presenten su denuncia en la Sección de Atención Primaria del MP, del área metropolitana, así como en las sedes de las oficinas regionales.

La fiscal de familia resaltó la importancia de fijarse en señales de alerta desde el momento del noviazgo. Acotó que las estadísticas nos dicen que los hijos que vienen de familias maltratadas, pueden convertirse también en maltratadores, porque el hijo quiere ser como el padre o la madre y comete los mismos errores. “Predicar con el ejemplo es mejor que con el consejo, porque se aprende más”, agregó.

Dijo que cuando se ve que no hay un respeto dentro de ese noviazgo, que hay ese poder que el hombre quiere dominar a la mujer, no hay respeto a los derechos o falta de comunicación, ya uno se puede observar que algo está pasado, y que en adelante la relación puede empeorar.

Entre las señales de alerta está que le quiera decir cómo vestir, si cortarse o no el cabello. Afirmó que es importante el cuidar su integridad, saber cómo vestir, y que estas orientaciones deben provenir de la madre o de la familia, pero que no sea el novio el quien disponga de su cuerpo, pues está pasando la raya sobre lo que son los derechos de ella tiene como mujer.