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Nunca se vendan, ni hipotequen la conciencia  

Nunca se vendan, ni hipotequen la conciencia   

El que vota contra su conciencia, vende su voto y a su patria, por ello el voto consciente es tan importante para construir una nueva sociedad fundamentada en los valores y la paz.

 

Por Karla Díaz

La conclusión del Diplomado de Observación organizado por la Comisión de Justicia y Paz, y la Universidad Santa María la Antigua, sirvió de escenario para recibir al Cardenal Óscar Andrés Rodríguez Maradiaga como orador central de la actividad, quien conversó con los diplomados, sacerdotes, candidatos políticos e invitados especiales sobre la “Buena Política en la Fratelli Tutti”.

Este diplomado tenía como objetivo formar a quienes serán los observadores y capacitadores de los miles de voluntarios que se inscriban como Observadores Electorales  para las Elecciones Generales del 5 de mayo de 2024.

El Cardenal Maradiaga invitó a los diplomados  a trabajar por construir la paz fundamentada en la justicia.  “En el mundo falta fraternidad; el papa Francisco nos pide ser una iglesia constructora de paz fundada en la justicia; por eso ustedes construyen el reino de Dios en Panamá, porque ésta es la manera de ir erradicando desde la raíz la corrupción política”, señaló.

También habló sobre la necesidad de una sana política y una economía integrada pensada en el bien común, para construir una nueva sociedad, destacando que como Observadores se desarrollará un protagonismo importante en las elecciones, sembrar la semilla de la verdad y de algo muy importante que se ha perdido, el honor.

 

Fratelli Tutti nos muestra caminos nuevos de humanización de la vida a través de lo que llama el Papa, “amistad social”.

 

Monseñor Oscar fundamentó su exposición en las 4 columnas que el Papa Juan XXIII dejó, que son: verdad, justicia, libertad y amor; sobre estos pilares hay que construir la nueva sociedad, no sobre la mentira y el engaño.                                                                                                                                      

En medio de su intervención, dio ejemplos de actos concretos que como Observadores deben realizar, como realizar todo con amor, paciencia y cordura; no llegar a realizar la labor como animalitos llenos de ira, sino con el don de ser promotores de la arquitectura del encuentro para promover la amistad.

Recordó que después de las elecciones, los observadores irradiarán bondad y formación, por lo que se sentirán satisfechos del deber cumplido; habrán sido parte fundamental del acto del voto en valores y no por personas, un voto en el cual la verdad se impone y regala libertad.

 

La esperanza está en los jóvenes

Monseñor José Domingo Ulloa, arzobispo de Panamá también estuvo presente en la ceremonia de graduación del Diplomado de Observación, y dijo a los presentes que es importante no ser conformistas y solo dar el voto, sino darle seguimiento a esa persona que es la que nos va a gobernar y a representar en el siguiente periodo.

“Para mí la esperanza son los jóvenes que se van involucrando en la política, y tienen  una gran responsabilidad, porque si ellos nos fallan, ¿a dónde iremos?, dijo el Arzobispo.

Agregó que está convencido de la necesidad del acompañamiento de jóvenes líderes, pues  hace falta liderazgo y  el conocer el amplio Magisterio Social de la Iglesia, pues a veces buscamos afuera lo que la iglesia por siglos nos ha dicho sobre la buena política.

Monseñor Maradiaga habló claro sobre el voto a conciencia.

A los observadores les dijo: “El papel de la observación es fortalecer ese acto sagrado del voto, tanto de los partidos como de los candidatos de libre postulación. Hay que meterse en la política, hay que involucrarse para poder ser parte de la solución”, dijo.

Para finalizar, se desarrolló un espacio de preguntas y respuestas. Diplomados y candidatos políticos presentes intervinieron en un ambiente de paz, concluyendo en la importancia de este tipo de diplomados para preservar la transparencia del ejercicio electoral.

Monseñor Oscar cerró su intervención destacando que la  conciencia es la voz de Dios que todos tenemos, es el sagrario más precioso de la vida de cada persona, y por ello no debemos contradecir nuestra conciencia, porque si nos dice que algo es malo, es malo.

“Hay también que incrementar la oración, pues elegir a los nuevos gobernantes es algo tan importante para el futuro de Panamá, por lo que sugiero que durante toda la Cuaresma que, pronto va a comenzar, se lleve  esa intención de orar por unas elecciones libres de corrupción; no nos cansemos de orar”, puntualizó.