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“Recibid el Espíritu Santo” el Arzobispo lo considera una urgencia en el camino de cualquier cristiano.

“Recibid el Espíritu Santo” el Arzobispo lo considera una urgencia en el camino de cualquier cristiano.

Este domingo la Iglesia celebró la Solemnidad de Pentecostés, y con este motivo conmemoró también el día cívico de la Etnia Negra.

 

Redacción

Monseñor José Domingo Ulloa encabezó en la Catedral Metropolitana Santa María Antigua la celebración del domingo del Pentecostés.

“Podría decirse que estamos en una etapa semejante a la de los apóstoles: nos mostramos miedosos, indiferentes, sin captar la gran misión para la que Cristo nos ha llamado” afirmó ante decenas de fieles, a quienes exhortó también de abrir el corazón para que el Espíritu Santo les transforme.

En su homilía Monseñor Ulloa explicó que la función del Santo Espíritu no es suceder a Cristo, ni suplantarlo, es llevar a plenitud la obra de Jesús.

Agregó que “le corresponde al Paráclito asegurar la presencia invisible y perenne del Señor y de su obra. Los apóstoles fueron capaces de vencer ese miedo y salir al mundo a predicar el Evangelio, a predicar la novedad” reiteró.

 

Ofrendas al Señor.

Día cívico de la Etnia Negra

El Arzobispo recordó a los congregados, entre estos: representantes del movimiento social afropanameño, líderes de diversas comunidades de fe y autoridades gubernamentales, que la Iglesia les ha acompañados través de la Pastoral Afropanameña, y ha sido testigo de los ingentes esfuerzos por derrumbar los muros de la discriminación y el racismo.

«Desde hace 23 años celebramos nuestra afrodescendencia y cada vez con mayor orgullo, más allá de las danzas, de la música, de la comida, de los colores, conmemoramos las raíces, las tradiciones, la ancestralidad y la lucha por el reconocimiento y la libertad desde la época colonial hasta nuestros días» dijo.

Reconoció el logro de la sanción de la Ley que crea la Secretaria Nacional de Políticas y Desarrollo de los Afropanameños, SENADAP, la cual contará con autonomía presupuestaria y administrativa para el impulso de programas, acciones y políticas públicas que contribuyan a la inclusión efectiva de los afrodescendientes en las tareas de desarrollo humano integral.

«Esto era una larga aspiración del movimiento social afropanameño que celebramos todos juntos, por la amplia participación de los líderes afrodescendientes, y la voluntad de las autoridades gubernamentales para llegar a este objetivo» expresó.