La feligresía de Chitré celebró su fiesta patronal en honor a San Juan Bautista con especial fervor desde sus novenas hasta la solemne misa presidida por el Obispo de Chitré, Monseñor Rafael Valdivieso Miranda, el pasado 24 de junio, junto a miembros del clero diocesano.
Monseñor Valdivieso hizo referencia en su homilía al nacimiento de Juan el Bautista y su papel en la historia de salvación de la humanidad. Dijo que “Dios elige a cada persona desde el vientre materno para una misión al igual que Juan, el precursor del salvador del mundo”.
En este contexto, Monseñor Valdivieso aprovechó para resaltar los valores familiares. “Es allí donde se observan las cualidades de los hijos y se les prepara para que descubran su misión en la vida”, agregó.
El obispo lamentó que el mundo de hoy esté viviendo todo lo contrario, pues hay muchas personas lastimadas desde la propia familia, en su fe, en su identidad y valores sociales.
Advirtió –sin embargo- “aquí” en nuestra región (Azuero) se percibe un alto valor a la familia y profunda expresión de fe, que nos identifica como pueblo creyente y acogedor, indicó.
La noche anterior, el 23 de junio, por segundo año consecutivo, el Arzobispo de Panamá, Monseñor José Domingo Ulloa Mendieta presidió la Salve y procesión junto a Monseñor, Rafael Valdivieso, y el párroco de la Catedral, padre José Héctor González.
Al terminar la procesión, el padre Andrés Pallares, como es costumbre en su panegírico, resumió la vida y obra de Juan el Bautista, y la devoción de un pueblo creyente, también próspero que adelantándose al futuro, construyó lo que fuera después la Catedral de la Diócesis de Chitré.