El Foro Permanente para las Cuestiones Indígenas, en la ONU, funciona como un órgano consultivo de alto nivel del Consejo Económico y Social.
Redacción
Educadores indígenas ngäbe que trabajan en comunidades de difícil acceso de la Comarca, y un sacerdote vicentino, participaron en el Foro Permanente para las Cuestiones Indígenas, realizado en la sede de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), en Nueva York, del 15 al 26 de abril.
Tanto los educadores Enith Sánchez y Rafael Mitre, como el reverendo José Fitzgerald, CM, representaron a la Congregación de la Misión de San Vicente de Paúl en el foro, que este año prestó especial atención a la voz de la juventud indígena, manifestó el sacerdote.
A través de los actos oficiales y eventos, se destacó la importancia de permitir que los jóvenes indígenas sean protagonistas del futuro de sus pueblos.
Muchos de ellos hablaron de las dificultades de estar “entre dos mundos,” pero confirmaron su compromiso de trabajar por un futuro justo en el que se respeten y atesoren los conocimientos y prácticas tradicionales indígenas, ofreciendo no sólo a sus pueblos, sino a todas las sociedades, la promesa de una nación en la que la armonía entre unos y otros sea una realidad.
“Tuvimos muchas oportunidades de compartir las realidades y los retos a los que se enfrentan los ngäbe y otros pueblos indígenas de Panamá en relación con la autodeterminación, en particular su habilidad para seguir viviendo su íntima relación con la tierra y los ecosistemas que les han sustentado durante generaciones, pese a muchas amenazas”, recalcó.
Temas y objetivos
El objetivo del foro es proporcionar asesoramiento especializado y recomendaciones sobre cuestiones indígenas a los programas, fondos y organismos de las Naciones Unidas; difundir información sobre cuestiones indígenas, y promover el respeto y la plena aplicación de las disposiciones de la Declaración de las Naciones Unidas sobre los Derechos de los Pueblos Indígenas, entre otras.
El tema de este año fue: “Mejorar el derecho de los Pueblos Indígenas a la libre determinación en el contexto de la Declaración de las Naciones Unidas sobre los Derechos de los Pueblos Indígenas: resaltar las voces de la juventud indígena”.
“Tuvimos la bendición de participar en otros eventos fuera de la ONU en colaboración con congregaciones religiosas, redes eclesiales ecológicas y el grupo de trabajo contra la minería. Estos espacios nos permitieron facilitar la construcción de relaciones con entidades eclesiales y civiles de otras regiones, que se comprometen con el objetivo común de promover los derechos indígenas y proteger a la Madre Tierra”, explicó José Fitgerald.
Las diversas luchas y realidades presentadas se hacen eco de las palabras del Papa Francisco en Laudato Si’, de que, para los pueblos indígenas, “la tierra no es un bien económico, sino don de Dios y de los antepasados que descansan en ella, un espacio sagrado con el cual necesitan interactuar para sostener su identidad y sus valores. Cuando permanecen en sus territorios, son precisamente ellos quienes mejor los cuidan”.