El Papa Francisco nos ha convocado al proceso de diálogo de sinodalidad, con una nota distintiva, una sola Iglesia, un solo pueblo de Dios escuchado y consultado.
Betzaida Toulier U.
Laicos y consagrados, representantes de parroquias urbanas y rurales de la arquidiócesis, están profundizando sobre la invitación a la sinodalidad que hizo el Papa Francisco a toda la Iglesia.
En su primera etapa, la Comisión del Sínodo en la arquidiócesis, ha hecho énfasis precisamente en el concepto de sinodalidad, tarea nada fácil. Una palabra nueva que se traduce como “caminar juntos”.
Al mismo tiempo el enfoque ha sido “informar del proceso, dar a conocer en qué consiste, utilizar los medios que hay al alcance a nivel de la comunidad, de forma presencial y también usando los medios virtuales”, indicó, Juan José Morán, de la Comisión Coordinadora Diocesana del Sínodo.
El 76% de las parroquias de la Arquidiócesis de Panamá están activas en el proceso sinodal y han conformado sus delegados parroquiales, algo que para Morán es de vital importancia.
Sínodo de la sinodalidad
Invitación. El Papa Francisco ha convocado para el mes de octubre del 2023 un sínodo de Obispos, bajo el tema: “Por una Iglesia sinodal: Comunión, participación y misión”.
Intención. Desde las diócesis todos los creyentes, pastores y fieles, participen en este proceso que ayuda al crecimiento y fortalecimiento de la Iglesia en su misión evangelizadora.
Acción. Se concretiza en la escucha atenta de todos los bautizados, y entre todos, buscar soluciones para avanzar en el camino de la fe, la esperanza y la caridad.
“Ya existen en tres zonas fechas definidas para comenzar a lo interno de cada parroquia”, indicó tras señalar que por ejemplo, en el caso de la zona centro está planeado para el 4 de marzo, en dos sesiones: una en Basílica Don Bosco y la otra en el salón Marcos Gregorio McGrath de la Arquidiócesis de Panamá, el mismo día.
En la Zona de San Francisco han planeado el lanzamiento a nivel parroquial para el 4 de marzo también. Mientras que en la parroquia Cristo Redentor la fecha establecida es el 5 de marzo.
Conformación de los delegados
Para partir, el rol de estos delegados es animar, motivar, y ser facilitadores del proceso del camino sinodal, explica Juan José Morán, y que hay delegados por zonas propuestos por cada uno de los vicarios, cuya misión es ayudar en la coordinación y logística. Un trabajo un tanto complejo porque cada zona puede tener entre 13 y 35 parroquias.
“Ante esta realidad es necesario que en cada parroquia haya dos a tres delegados” aconseja el Coordinador de la Comisión del Sínodo en la Arquidiócesis, debido a que hay parroquias que tienen muchas capillas. Un ejemplo claro es la parroquia San Isidro labrador de Capira con 82 capillas.
“El objetivo es formar líderes en las comunidades parroquiales que desarrollen el proceso sinodal, de escucha y consulta a todos los niveles, en particular a los marginados de la sociedad, como también a cristianos y a no cristianos, como propone el papa Francisco”, indica Morán.
Hay también delegados de los movimientos. “Queremos que estos delegados sean agentes multiplicadores en su movimiento, difundiendo y animando el proceso del camino sinodal.
En cuanto a la formación, dijo que comienza con la introducción a la sensibilización de lo que es sinodalidad; luego apoyar y fortalecer el trabajo en equipo; la resistencia al cambio y escucha activa.
Según Morán, en la Asamblea Eclesial se reveló la urgente necesidad de mejorar la capacidad de escucha, y para lograrlo se desarrollarán talleres dirigidos a fortalecer este aspecto de vital importancia en este camino sinodal.
La encuesta
Dentro del plan de trabajo, en la Arquidiócesis se ha incluido una encuesta que recabará en una primera instancia, “como estamos en este camino sinodal.” Morán explica que es una encuesta a lo interno de la iglesia, y a personas que no son activos en la Iglesia, inclusive a los que no profesan nuestra fe.
La encuesta tiene una intención. “A través de la encuesta necesitamos conocer como está la percepción que tiene nuestra comunidad sobre la sinodalidad”, algo que para Morán ayudará a ir corrigiendo y sugiriendo acciones.
Detalló que la encuesta se hará de manera electrónica, y en las parroquias se aplicará a los feligreses y se tendrá un buzón para que depositen sus opiniones. Los resultados se introducirán en una plataforma digital.
Dentro del plan de trabajo se hará otra encuesta, informó Juan José Morán. “A través de este recurso podremos ir monitoreando como va el avance de este proceso”, afirmó.
Concluyó que este proceso no tiene un fin. “Es un trabajo de día a día. Se esta en una etapa de operación. Me refiero a que se está creando una estructura que por supuesto toma tiempo. La idea es no parar porque el proceso de desarrollo de sinodalidad, de caminar junto es permanentemente”.
Escuchar el clamor de la gente
Comunión, participación y misión. A eso ha llamado el papa Francisco al convocar al Sínodo de la Sinodalidad, proceso permanente “que exige aprender a ejercitarnos en el discernimiento personal y comunitario”, asegura el padre Van Quatem, de la Comisión del Sínodo.
“Se trata de escuchar el clamor de la gente”, asegura el sacerdote, para discernir cual es la voluntad de Dios “a través de los aportes de todos y de cada uno”.
Enfatiza que este ejercicio debe salir de la misma gente, como ha pedido el papa Francisco. El trabajo de la comisión es apoyar el proceso, dar algunas pautas, orientar, abrir algunos caminos.
Reconoce que quizás la iglesia panameña está “un poquita atrasada, comparándonos con otras realidades, otros países, pero estamos activando el proceso”.
Recordó que durante los meses de octubre a diciembre se comenzó a motivar y sensibilizar al clero, y luego a trabajar con delegados parroquiales. “Ha sido un poco difícil, porque el tema de la sinodalidad es desconocido, y cuesta crear conciencia aclarando los conceptos”.
“Vamos paso a paso”, expresó. Pero que, en aras de la verdad, hay parroquias que se están quedando atrás por distintos motivos. No están manteniendo el paso. “Lo cierto es que tenemos que seguir hacia delante, de manera que se cumpla el anhelo de escuchar a todos”, comentó.
Y es que el trabajo de escucha no se limita a la parroquia. Desde el lanzamiento del Sínodo de la Sinodalidad se ha dicho que va más allá de nuestros templos, el objetivo es escuchar también a aquellos que no están directamente vinculados a la Iglesia.
El camino sinodal no es fácil, es desafiante pero que conduce a la auténtica “conversión pastoral”.
El padre Van Quathem señala que hay que escuchar inclusive a los que difiere con la Iglesia. “Es saber por qué, cuáles son los motivos, sus sentimientos, porque el espíritu de Dios está señalando en que medida la iglesia tiene que cambiar, tiene que convertirse para ser fiel a la voluntad de Dios.
Hizo un llamado especial a los medios de comunicación para que se integren a esta primera etapa de sensibilización, pues reconoce que juegan un papel sumamente importante.
“La voz de Dios ya no se limita a la voz del cura que predica. Son un recurso sumamente valioso para crear conciencia, para sensibilizar para motivar. Su aporte a este proceso de escucha es de vital importancia”, resaltó