Oratorio Don Bosco comparte con la niñez

Desde su llegada a Panamá en 1907, el Oratorio Festivo Don Bosco ha sido parte fundamental del trabajo pastoral que realiza la Basílica Menor Don Bosco. La dinámica con los niños no ha cambiado; se realiza en un ambiente festivo en el que se reúnen para interactuar, hacer amigos y recibir esa atención especial a semejanza del fundador, Don Bosco. Utilizando su pedagogía.

Alrededor de 12 a 15 los voluntarios atienden a este grupo de niños cada domingo desde las 8:30 a.m., iniciando con el rezo del santo rosario, luego la formación y la Eucaristía. Luego en un ameno compartir, todos participan en actividades recreativas y reciben una merienda.

El padre César Lacayo, considera que este trabajo pastoral es un proceso bastante activo en la iglesia, aunque reconoce que cuesta que los niños participen debido al entorno al que se enfrentan. Para conquistarlos hay muchas veces que ir a buscarlos a sus propias casas.

Unos 60 niños participan actualmente, aunque en ocasiones llegan más de 100. Un porcentaje proviene de sectores como: Cabo Verde, Llano Bonito, La Macarronera, San Miguel, sectores que son área roja cercanos al templo.

Fiesta y diversión

La Navidad del Niño Feliz 2019 se retomó en este año. La actividad se desarrolla con un programa divertido, pero a la vez de formación con la participación de los catequistas y animadores que les han acompañado durante el año.

Gaspar Javier Contréras, frecuentaba el Oratorio, y es acolito, tiene 14 años. A pesar de vivir lejos forma parte del Movimiento Juvenil Salesiano y apoya en esta ocasión como voluntario en el Oratorio Festivo Don Bosco.  No duda en reconocer que atender a los niños en el Oratorio es una experiencia enriquecedora. “Se aprende con ellos, y más que compartir, es darnos, es una experiencia gratificante”, acotó.